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Heriberto Pazos Ortiz, diez años sin justicia plena

por Agencia Zona Roja

Evlin Aragón/Zona Roja.

Oaxaca de Juárez, Oax., 23 de octubre de 2020.- Era un sábado como cualquiera; al menos eso parecía.

Sin embargo, ese día la vida de la familia Pazos Ortiz cambio para siempre, pues la mañana del 23 de octubre del 2010, Heriberto Saúl quien fuera dirigente del Movimiento de Unificación de Lucha Triqui (MULT), fue asesinado a balazos 

Los hechos se registraron sobre la avenida El Rosario, en la agencia de Cinco Señores, minutos después de que Pazos Ortiz saliera de su domicilio, ubicado en la calle Emiliano Zapata, colonia Roma, en el municipio de Santa Lucía del Camino. 

El líder social viajaba en una camioneta Chevrolet, Colorado LT, negra, a la que dos hombres que se desplazaban en una motocicleta dieron alcance, para inmediatamente dispararle en la cabeza y terminar así con su vida, ello pese a estar custodiado por elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones. 

De acuerdo con las primeras investigaciones, Jesús Rubén Maldonado Marmolejo, alias “El Dragón”, así también de Jesús Espinoza Luis, alias “El Talibán”, fueron señalados directamente de ofrecer 300 mil pesos por la ejecución del líder triqui, según consta en las investigaciones de la FGJEO. Ambos sujetos fueron ejecutados posteriormente al asesinato de Heriberto Pazos.

Así mismo, refirieron que la oferta fue aceptada por Roberto Jorge Navarro, alias “El Thin”, junto con Amores Alberto Navarro Martínez, alias “El Chango”, quienes presuntamente conducían la motocicleta que se emparejo a la camioneta y accionaron el arma que terminó con la vida del dirigente indígena. 

El primero de los señalados como autores materiales fue detenido al interior de su domicilio, en el año 2011, por elementos de la entonces Procuraduría de Justicia a cargo de Manuel de Jesús López López, y trasladado al reclusorio de Santa María Ixcotel, y el otro se encuentra prófugo de la justicia. 

MÁS DETENCIONES

Cuatro años después de los hechos, y ya con Joaquín Carrillo Ruiz como procurador, se anunció la detención de seis individuos acusados como presunto responsables del homicidio: Juliantino García Ramírez, Reynaldo Martínez Álvarez, José Merced Campaña Quiroz, Gerardo Pérez Camacho, Rufino Juárez Hernández y Roberto Cárdenas Rosas, todos participantes en una reunión verificada el 10 de mayo del 2010, donde se acordó el asesinato. 

Pese a lo anterior el año pasado, al cumplirse nueve años del crimen, magistrados de la Cuarta Sala del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJEO), revocaron la sentencia de 40 años de prisión en contra de Roberto Cárdenas Roas y Rufino Juárez Hernández, ordenando incluso que se giraran sus boletas de libertad. 

Por todo lo anterior y no obstante  que ha pasado una década, la justicia aún se mira lejana en este caso que propicio que se fractura aún más la relaciones en la zona triqui, ya de por si afectada por la violencia, que a la fecha no logra conseguir los acuerdos necesarios entre sus distintas expresiones para lograr la paz.

Actualmente son el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (Mult) y su escisión 23 de Octubre, el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (Multi), la Unión de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort) y la recién creada Unión Democrática de Pueblo y Comunidades Indígenas (Undeci), quienes se disputan la lucha social en la zona e incluso reportan enfrentamientos constantes de los que se responsabilizan mutuamente.  

FAMILIA PIDE JUSTICIA

“Todo el tiempo vamos para atrás, ¡qué clase de gente está llevando las leyes de Oaxaca!, son parte de las declaraciones Magda Pazos Ortiz, hermana de Heriberto, al referirse a la Fiscalía General de Justicia del Estado y su titular, Rubén Vasconcelos Méndez. 

La también luchadora social lamenta que para las autoridades ya sea normal lavarse las manos, argumentar que no saben nada, burlarse de las víctimas y pedirles que no se enojen a pesar de que a simple vista se puede observar que no hay compromiso para hacer justicia en la entidad.  

“Siento esa indignación, no cansancio porque cansancio no vamos a tener nunca para estar luchando, pero es terrible tener que toparse con paredes todo el tiempo y con un sin fin de mentiras. Lo que queremos por dignidad es el esclarecimiento del asesinato, sino para que están sentados en ese lugar, sino hacen nada, sino avanzan nada, solo nos engañan. Esto ya es clásico en Oaxaca, nada se puede aclarar”, dice.   

Lamenta que pese al perfil que presume el fiscal, éste no haya podido con el paquete y las cosas en materia de justicia sigan igual o peor en la entidad, ya que asegura que en lugar de avanzar van para atrás en el caso de Heriberto Pazos que aún se ve lejos de obtener justicia. 

“Es gente que pierde el piso, que ya no sabe a lo que llegó, se le olvida que lo que viene a hacer es justicia, que es su obligación y que sólo eso es lo que pide el pueblo de Oaxaca”, concluye en referencia al fiscal.

Este 23 de octubre, cientos de personas se movilizan en la capital de Oaxaca y su zona conurbada, para exigir justicia.

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