Evlin Aragón/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 19 de noviembre de 2020.- La presidenta de Grupo de Estudios sobre la Mujer “Rosario Castellanos”, Angélica Ayala Ortiz, aseguró que la pandemia dejo al descubierto las deficiencias que existen en la instancia de procuración de justicia en Oaxaca, particularmente de aquellas que reciben las denuncias y atienden la violencia de género como el Centro de Justicia para las Mujeres (Cejum).
Para la activista, es una realidad que el aumento de la violencia al interior de los hogares, debido al confinamiento como medida para evitar la propagación del Covid-19, dejo al descubierto la necesidad de contar con instancias de atención integral con personal capacitado y sensible que vuelva realidad las denuncias de las mujeres y no re victimicen al punto de que se evite señalar a los agresores.
“Se debe entender que, de una atención puntual de las instituciones en materia de justicia integral como el Cejum, depende la vida de las mujeres”, dijo como parte del conversatorio que realizó la organización este miércoles.
Ayala Ortiz explicó que la prioridad de los centros de justicia para las mujeres ha quedado sólo en el discurso, toda vez que en la práctica el personal sigue revictimizando a las usuarias, las responsabilizan de la violencia, se les condiciona para tomar la denuncia, dan pie a la conciliación con el agresor, por lo que en general hace falta capacitación y sensibilización del personal.
Situación que aseguró es grave ya que, instancias como estas son necesarias y deben contar con protocolos de atención y planes de seguridad muy claros, que se apliquen aunque las mujeres no vayas acompañadas por alguna organización social.
Y es que, de acuerdo con la activista la pandemia también sacó a relucir que las autoridades agilizan la atención si las mujeres van acompañadas de alguna organización o abogada conocedora de los procedimientos, de lo contrario o no la atienden o lo hacen con las deficiencias antes mencionadas.
“GesMujer acompañó a mujeres que ya habían ido de primera cuenta al Cejum y no fueron atendidas, fue necesaria la presencia de la organización para que recibiera atención digna”, señaló.
Así mismo, refirió que ante las carencias que presentan las instituciones gubernamentales, fue necesario que las organizaciones sociales habilitaran –como lo hacen desde hace mucho tiempo- redes de apoyo y líneas de atención a distancia para dar acompañamiento a las mujeres que han sido víctimas de violencia al interior de sus hogares, en mayor medida por sus parejas sentimentales.
Para la activista, el Cejum se ha quedado corto en la atención de la violencia de género en esta contingencia sanitaria, periodo en el que las mujeres se han enfrentado a la dificultad de contar con las ordenes de aprehensión que les permitan mantenerse a salvo, las cuales sólo se han logrado cuando se han hecho acompañar de alguna organización de la sociedad civil
“La Covid mostró las profundas deficiencia y debilidad de las instancias de procuración de justicia. Faltan recursos, capacitaciones, sensibilidad, la suma de todas ellas es la que tienen a Oaxaca con los altos índices de violencia feminicida y con el riesgo constante para sus mujeres”, sentenció.