Redacción/Zona Roja.
Oaxaca de Juárz, Oax., 10 de diciembre de 2020.- Por considerar que no fue presentado en tiempo y forma y mucho menos completo, el Congreso local rechazó hoy dictaminar las cuentas pública estatal y municipales del ejercicio 2019, del Órgano Superior de Fiscalización del Estado de Oaxaca (OSFEO).
Ello generó un debate entre diputados de diversas fracciones parlamentarias; la mayoría coincidió en reprobar las irregularidades e incluso se planteó la renuncia del titular de ese organismo, Guillermo Megchún Velásquez. La iniciativa fue avalada con 26 votos, en la sesión extraordinaria de este jueves.
Lo anterior se debe a que el OSFE, como Órgano Técnico del Congreso, tuvo como fecha límite para entregar ante la Comisión Permanente de la 64 Legislatura, dichos informes el pasado 30 de noviembre; la fecha venció, pero no entregó la documentación completa.
Ante la Comisión únicamente se entregó la fiscalización correspondiente al 25 por ciento de la Cuenta Pública Estatal, y del 26 por ciento de la municipal.
Los resultados de la fiscalización deben presentarse en una sola entrega ante el Legislativo, toda vez que no existe precepto legal alguno que admita o faculte al Órgano Fiscalizador a que se realicen y presenten de manera parcial o en etapas, por lo que su presentación es inconstitucional.
Por esto, la Comisión determinó que dicha información resulta insuficiente para poder someter, a más tardar el 15 de diciembre ante el Pleno Legislativo, el dictamen correspondiente sobre la Cuenta Pública 2019, tal y como lo indica la Constitución Política local en su Artículo 59, Fracción XXII.
GENERA CONFRONTACIONES
Fue la legisladora por el PAN, María de Jesús Mendoza, quien hizo la observación que en la sesión de ayer, fue aprobado un Punto de Acuerdo para extender por tres días más la recepción de los informes.
César Morales Niño, del PT, fue más allá:
“Aplaudo la determinación de la Comisión Permanente de Vigilancia, pero no debemos ser cómplices, porque no respeta su obligación constitucional. Pido que seamos contundentes, implacables con esta resolución.
“Independiente de este acuerdo, inicien procedimientos de revocación al auditor superior y dé vista a las autoridades penales correspondientes, por el delito de ejercicio indebido del cargo y coalición de servidores públicos.
“No se vale que el auditor se escude en la pandemia, para esconder su incompetencia”, dijo.
Detalló que es la tercera vez que no cumple con las expectativas, pues de la cuenta 2017 se le hicieron las observaciones por omisiones que cometió; el 2018, la cuenta pública será rechazada, como está propuesto, y la 2019, no se recibió por incompleto.
Reviró Aurora López Acevedo, del PVEM, quien dijo que no está de acuerdo en la determinación de la Comisión Permanente de Vigilancia, pues “estamos utilizando al auditor Guillermo Mengchún como un parapeto de muchas corrupciones que están ocurriendo en este Congreso”.
Intervino también Lilia Mendoza, del PRI, quien dijo estar de acuerdo con Morales Niño, “sólo que no se salga sólo el auditor; si se va a hacer una limpieza en la OSFE, que salgan también los directores, que por cierto pusieron muchos de ustedes, la oposición; nada más la cabeza pertenece a gente que no es de ustedes”, dijo, al demandar una auditoría de los dos años anteriores del Congreso.
Por alusiones, Laura Estrada, de Morena, respondió que en el año que fue presidenta de la Junta de Coordinación Política, ya hay una auditoría en curso y que el auditor no cumplió con el plazo adicional que se le otorgó para entregar las cuentas públicas. Tras ello se sometió a votación y fue aprobado por mayoría.
