Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 10 de enero de 2022.- Con retardos, esta semana se inscriben formalmente los precandidatos del PRI a la gubernatura de Oaxaca, mientras los demás partidos llevan la delantera en sus asignaciones.
No obstante, no se puede concluir que el Revolucionario Institucional va lento en su proceso interno, pues sus o su operador político llevan la delantera de manera soterrada a todos los demás, incluso a Morena, donde han insertado varios cuadros con el disfraz verdeecologista.
¿Realmente va a perder el PRI la contienda electoral como se ha reiterado de manera insistente? ¿La lentitud en su proceso es sinónimo que entregará la plaza sin aspavientos? ¿La relación de los Murat con el Presidente Andrés Manuel López Obrador es meramente administrativa? Todas las respuestas apuntan al no.
EL “PRIMOR”
EL PRI se comenzó a disfrazar de morenista desde hace mucho, a nivel nacional, con sus acuerdos tanto con el PVEM como con el PRI, en este último caso de manera más discreta. Tanto que a ese conjunto de fuerzas políticas, principalmente para maniobrar en el Poder Legislativo federal, se le comenzó a conocer como “PRIMor”.
Ahora esos amarres se trasladan en el terreno político y el primer resultado es que el priismo haga el menos ruido y la menor competencia en la disputa de al menos seis gubernaturas, con un dirigente nacional tricolor, Alejandro Moreno, entregado totalmente al poder presidencial, y el PVEM complaciendo en todo lo que se puede a quien hoy manda en el país, con tal de sobrevivir.
Pero eso no es gratuito ni sencillo, en el caso de Oaxaca, pues aunque sí hay tardanza en la elección del candidato priista, debajo de las aguas hay amarres desde hace mucho tiempo.
Desde el informe legislativo que rindió Salomón Jara Cruz en Santa Cruz Xoxocotlán, el ex dirigente estatal del PRI, Jorge González Ilescas acudió personalmente a ese encuentro masivo y reveló su apoyo al morenista. En tanto, para nadie es un secreto que otro priista de largo pasado, Adolfo Toledo Infanzón, apoya y asesora a la Cuarta Transformación oaxaqueña.
Ya se sabían, pero quedaron más claros los respaldos tricolores el pasado viernes, en que la coalición “Juntos haremos historia por Oaxaca”, develó a sus cuadros morenistas-priistas.
A Morena se unió el diezmado Partido Unidad Popular, impulsado hace casi dos décadas, en el sexenio de José Murat, con el extinto Heriberto Pazos Ortiz a la cabeza y ahora, desde hace más de una década, con Uriel Díaz Caballero, quien enfrenta un proceso interno y pese a lo cual, obedece a intereses priistas, como ha sido siempre.
También, aunque perdió el registro Fuerza por México, la ex priista de toda la vida, Salomé Martínez Salazar, hechura política desde los tiempos de José Murat, decidió llevar toda la fuerza de CATEM para Morena, pese a los magros resultados en el reciente proceso electoral que concluyó.
Otro de los cuadros priistas: Samuel Gurrión, prestanombres oficial y quien se ha prostituido políticamente, obedeciendo las órdenes de su jefe para estar ya sea en el PRI o en el PAN o en el PVEM y ahora con Morena, sin saldos redituables más que los negocios empresariales.
Está también el diputado federal José Antonio Estefan Guillesen, colocado en la dirigencia del PVEM por órdenes priistas, hijo de prominente priista José Antonio Estefan Garfias, que también se prestó para irse un rato al PRD.
Raúl Bolaños Cacho Cué, otro priista de alcurnia, más no de trabajo, que tras su fracaso en su aspiración a la candidatura, se dice listo para apoyar al o la candidata de Morena, con tal de seguir viviendo de la política.
LOS TRICOLORES
En tanto, la relación Andrés Manuel López Obrador-Alejandro Murat sigue viento en popa; en lo administrativo, se cumplirá este año, el último del gobernador, la conclusión de la supercarretera Oaxaca-Costa, no así la del Istmo ni tampoco el Corredor Interoceánico.
Pero eso sí, los acuerdos trascienden más allá y el apoyo presidencial no es gratuito, pues a cambio se prevé que el actual gobernador pase de inmediato a un puesto federal, como pago de favores.
Por lo pronto, en menos de dos semanas se sabrá el nombre del abanderado priista que, como ya dijimos, podría ser Francisco Ángel Villarreal, pues de los aspirantes, hasta ahora es el de más peso político.
¿Y LA OPOSICIÓN?
El pasado jueves, el Partido Acción Nacional, presentó a sus tres aspirantes, Natividad Díaz Jiménez, Carlos Moreno Alcántara y Gerardo García Henestrosa; lo único rescatable es que todos han sido leales al partido y la designada sería la actual diputada local.
El viernes, Alejandra García Morlán dio a conocer su postulación por el Partido Movimiento Ciudadano, que no tiene militantes más que sus dirigentes. En el PRD, hasta ahora el único anotado es Eloí Vásquez López.
Así que con esa “oposición”, los acuerdos PRI-Morena van viento en popa y así gane Morena la gubernatura, se seguirán imponiendo los priistas.