Eduardo Bautista Martínez*
Desde las últimas décadas se ha insistido en la participación de la gente en los procesos de desarrollo, con la presencia de los involucrados en acciones de información, deliberación, consulta previa y toma de decisiones, como una condición necesaria para el logro de metas.
El debate ha estado presente en la academia con aportes editados por organismos financieros internacionales, como, por ejemplo, en dos publicaciones con el mismo nombre, pero de diferentes autores (Primero la gente. Michael Cernea, 1995; Amartya Sen y Bernardo Kliksberg, 2007), por mencionar algunos.
Desde perspectivas que cuestionan la ética de las intervenciones desarrollistas, se refieren a “la falta de equidad en los arreglos institucionales, lo que da lugar a una distribución desigual de los beneficios de la globalización” (Sen), y justifican la necesaria inclusión y participación de los pueblos y comunidades, con perspectiva de reconocimiento de la pluralidad e integración para propiciar beneficios equitativos e igualitarios.
Además de las múltiples aportaciones académicas, en México y en el mundo, existen instrumentos internacionales como el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre Pueblos Indígenas y Tribales, la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas; los controles de constitucionalidad y convencionalidad, y demás disposiciones legales en los ámbitos federal, local y consuetudinario.
En este marco podemos situar los trabajos para la incorporación de las instituciones de educación superior en la “Estrategia de Fortalecimiento del conocimiento para la actividad productiva y el desarrollo humano en el Istmo de Tehuantepec”, que a partir de la identificación de necesidades de las actividades productivas en el proyecto interoceánico, generen aportes en la formación y profesionalización de la población y su vinculación con la economía en torno a los llamados “polos de desarrollo”.
Los retos implican esfuerzos de coordinación para la investigación y la formación científica, técnica, administrativa, pero, sobre todo, para una perspectiva humanista que permita una oferta educativa de licenciatura, maestría y doctorado con pertinencia y retribución a la sociedad, al territorio y al medio ambiente, toda vez que esos profesionales incidirán en los procesos de desarrollo en el transcurso del mediano plazo.
Los criterios de pertinencia y territorialidad se establecen en la nueva Ley General de Educación Superior, la cual establece “la consolidación de la identidad, el sentido de pertenencia y el respeto desde la interculturalidad que promueva la convivencia armónica entre personas y comunidades para el reconocimiento de sus diferencias y derechos, en un marco de inclusión social”.
La nueva Ley referida, destaca la condición de inclusión para que todos los grupos sociales, de manera particular los denominados grupos vulnerables, participen activamente en el desarrollo del país, por lo que en términos formativos establece “la generación y desarrollo de capacidades y habilidades profesionales para la resolución de problemas; así como el diálogo continuo entre las humanidades, las artes, la ciencia, la tecnología, la investigación y la innovación como factores de la libertad, del bienestar y de la transformación social”.
Por ello, uno de los retos para el Consejo Regional en materia de formación, profesionalización y vinculación del proyecto interoceánico del Istmo de Tehuantepec y de sus grupos de trabajo interdisciplinario, es colocar al estudiante en el centro del proceso educativo así como la generación de los vínculos entre escuelas y comunidades para propiciar una participación informada, crítica y activa en la solución de problemas y la construcción de iniciativas con perspectiva territorial.
Muy importante la integración alentada desde la Secretaría de Educación Pública, de las universidades e instituciones de educación superior de los estados de Oaxaca y Veracruz, y particularmente la inclusión de expertos de las distintas disciplinas, quienes, con perspectiva humanista, seguramente alentarán la participación informada de la gente en el desarrollo del Istmo de Tehuantepec.
* Rector de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca.
Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad Autónoma Metropolitana
Twitter: Bautistaeduardo