Yuridiana Sosa/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 24 de julio de 2022.- Sin consulta a la asamblea comunitaria, el edil de San Pedro y San Pablo Ayutla, Juan Galván Rojas, sigue imponiendo sus decisiones en los acuerdos sobre los límites con Tamazulápam del Espíritu Santo, violentando derechos de los comuneros y propiciando la desestabilidad social.
Así lo denunció ante Laura Morales Juárez, comunera de Ayutla, quien aseveró que Galván Rojas sostiene un gobierno que va contra los usos y costumbres de la comunidad, pues la población desconoce los supuestos acuerdos a los que llegó con la población vecina para terminar con varias décadas de conflicto.
La afectada apuntó que la comunidad desconocía sobre la firma que llevaría a cabo el edil con su homólogo de Tamazulápam el pasado 10 de junio en Santa María Huatulco, donde en presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, anunciaron y firmaron los avances alcanzados entre ambas comunidades para lograr la paz en la zona.
Ni antes de esa fecha ni ahora el presidente municipal ha informado de esos avances, lo cual preocupa a unos 23 de los 27 posesionarios de tierras que se ubican sobre las colindancias.
Morales Juárez apuntó que la exigencia principal a las autoridades es el respeto a sus tierras, que no haya despojo.
“No nos oponemos a la disolución de la mancomunidad, pues es necesario para ambos, es importante que cada quien tenga su comisariado de bienes, pero con lo que no estamos de acuerdo es el despojo de tierras”, destacó en su denuncia.
CENSURA Y EVASIÓN
En repetidas asambleas, los comuneros han solicitado al edil información sobre el tema, sin embargo, el presidente ha implementado acciones de censura, pues ya no se les permite tomar la palabra para abordar un tema de interés colectivo, o debatirlos.
Incluso personal del presidente ha intentado golpear a los comuneros inconformes cuando tratan de comentar sobre una problemática. Mientras que en otras ocasiones arreglan la mesa de los debates, las votaciones y hasta limita el tiempo de la duración de las asambleas.
Todo eso, señaló la mujer, va contra las costumbres de gobierno en la Ayutla, pero ahora, por alguna razón, los habitantes de las agencias municipales también temen en alzar la voz.
Esta situación mantiene a la comunidad en una tensa calma, en la que aún no se perciben los cambios para acabar con el añejo conflicto de límites de tierras.
De acuerdo a la autoridad municipal de Ayutla, en una asamblea se acordó en septiembre de 2021 la delimitación de las líneas colindantes y el 27 de noviembre de ese mismo año se realizaron los trabajos de brecheo y amojonamiento para definir la posesión y propiedad de los terrenos comunales entre las comunidades de San Pedro y San Pablo Ayutla y Tamazulápam del Espíritu Santo.