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Opinión. Morenistas, basura y gobiernos municipales irresponsables

por Agencia Zona Roja

Ismael García M./Zona Roja.

Oaxaca de Juárez, Oax., a 31 de octubre de 2022.- ¿Alguien ha entendido por qué el ayuntamiento de Zaachila, morenista, cierra un tiradero en terreno propiedad de Oaxaca de Juárez, también municipio morenista?

Eso fue lo que pasó el pasado 8 de octubre y a tres semanas, la capital es un caos, un tiradero a cielo abierto, que recibió a los turistas con calles y parques atestados de desechos y que hoy escala, con un paro de labores de trabajadoras.

Y con el repudio de los capitalinos también, ante la incapacidad que ha mostrado Francisco Martínez Neri para resolver el problema.

Recriminaciones además por parte de autoridades de la zona metropolitana, por la medida arbitraria que tomó Rigoberto Chacón Pérez.

La crisis de la basura se extiende paulatinamente a Santa María Atzompa, la propia Villa de Zaachila, Santa Cruz Xoxocotlán, San Sebastián Tutla, San Antonio de la Cal, Santa Lucía del Camino, entre otros, sin que nadie tenga la capacidad para frenar la polución.

TRASPIÉS DE NERI

Los conflictos de Martínez Neri se originaron en casa. Es decir, por irresponsabilidad y poca experiencia para atender este tipo de problemas.

Con conocimiento de que desde hace más de un lustro se debía cerrar el tiradero ubicado en Zaachila, sus operadores políticos, principalmente el secretario General Felipe Canseco, no hicieron absolutamente nada para prevenir la situación.

En primer lugar, jamás recuperaron la rectoría del basurero, terreno ubicado en Zaachila, pero cuyo espacio administraba el ayuntamiento capitalino, por lo tanto, sabían del lastre ambiental como de la crisis que vendría en caso de que se cerrara pronto.

Por cierto, ¿en dónde está el dinero que cobraba la hacienda capitalina a cada camión que ingresaba para tirar su basura, proveniente de al menos 25 municipios?

Y así ocurrió y en julio pasado vino la advertencia de Zaachila —de manera irregular, por parte del edil morenista Rigoberto Chacón—, bajo el argumento de que los colonos ya no querían la contaminación que se generaba.

Una mentira, pues los habitantes de la zona viven o vivían prácticamente de la pepena; al menos un centenar de personas acudía a buscar plástico, metales, ropa, cartón y otros materiales revendibles.

Mentira también porque el control pasó a manos del Frente Popular “14 de Junio”, que con pistoleros ordenaba quién entraba no sólo al basurero, sino a los asentamientos de la parte alta de la agencia Vicente Guerrero.

¿Cómo se dejó “convencer” Neri? Lo que se sabe es que hubo una mala operación política que incluso sorprendió al propio presidente capitalino.

Pese a que desde hace más de un lustro, por no decir casi una década, en que el tiradero ya había llegado a su tope.

Pero ya se habían invertido también millonarias cantidades de dinero —como reseñamos en este espacio semanas atrás— desde la época de Gabino Cué, para seguir prolongando el uso, en tanto se conseguían otras opciones.

HABÍA TIEMPO

No hay rastros en el plan municipal de Oaxaca de Juárez en que se haya priorizado la creación de un tiradero propio; tampoco lo hubo con Oswaldo García Jarquín y sus antecesores.

A mediados de este año estalló el problema con la advertencia de Zaachila, que puso en jaque al gobierno estatal, lo que orilló a una reunión entre autoridades estatales y municipales, el pasado 21 de julio, encabezada por el gobernador Alejandro Murat.

Como siempre, quejas, reclamos, y al final un acuerdo que firmaron todos los asistentes, con la creación de un comité y compromisos precisos… que nadie cumplió:

1) Continuar con el saneamiento del relleno sanitario.

a) Trabajar en la estabilización de taludes en la parte sur del relleno, mejorar sistemas de manejo de biogás y lixiviados, estas acciones están programadas hasta el 30 de noviembre del 2022. La Semaedeso solicitará los recursos necesarios para continuar con estas actividades en el 2023 que, en su caso serían ejecutadas por la nueva administración estatal.

b) Revisar el origen de los materiales pétreos a utilizar para las coberturas del relleno.

c) De las tarifas cobradas por el municipio de Oaxaca de Juárez por el acceso, se deberá destinar al saneamiento del relleno sanitario.

2) Acciones a que se comprometen en cada uno de los municipios

a) Aplicar medidas para disminuir generación de residuos (a grandes generadores, a eventos patronales, fiestas etc.)

b) Aplicar lo dispuesto en el artículo 98 fracción XII y artículo 99 de la Ley para la Prevención y Gestión Integral de Residuos Sólidos, con el objetivo de limitar y de ser posible terminar el uso, distribución y venta de “desechables” de unicel, popotes, y en general, utensilios plásticos de un solo uso.

c) Separación desde origen (casas-habitación, oficinas, centros de trabajo)

d) Los municipios deberán identificar a la brevedad sitios de disposición final (ya sea por municipio o por grupo de estos).

e) Aplicar sus reglamentos municipales en materia de residuos sólidos.

f) Adecuarán a sus condiciones y ejecutarán a la brevedad, el reglamento tipo en materia de residuos que la Semaedeso les hará de conocimiento.

Y NADIE CUMPLIÓ

Hoy la crisis de la basura está por cumplir un mes y la problemática crece en los municipios de la zona metropolitana.

Apenas este domingo se dio a conocer una sanción contra el ayuntamiento de Zaachila por un tiradero irregular, mientras que vecinos de Santa María Atzompa se rebelaron por el depósito a cielo abierto.

Pero en la capital, por ser el municipio con el mayor número de habitantes en el estado, es donde se concentra, y llama la atención, la problemática, que este lunes detonó con marchas y paro por parte de sindicalizados.

Los traspiés del morenista Martínez Neri han generado hasta reclamos de diputados morenistas, como sucedió la semana pasada en que Nancy Benítez recriminó que se utilice el parque “El Tequio” como tiradero de desechos orgánicos, por lo que ahora se detuvo también la recolección de ese tipo de basura.

El pasado jueves, el edil dijo que ya había terreno, pero no se ha concretado la compra; hace dos semanas el gobernador Alejandro Murat anunció que se habían otorgado cinco millones de pesos al ayuntamiento para adquirir el predio.

De bandazos en bandazos, lo único que ha provocado el gobierno capitalino es más caos y más contaminación.

Sigue permitiendo que CATEM llene de basura la ribera del “Atoyac”; en toda la zona, los montones crecen y hasta quitan espacios a los comerciantes; el depósito provisional ubicado en un inmueble a medio construir, cerca del río “Salado”, está totalmente lleno, generando más polución.

Las protestas por la acumulación de basura en las calles siguen ocurriendo como sucedió la semana pasada con los colonos de la Artículo 123 y Arboleda; días antes en el Infonavit Primera Etapa y apenas vienen más.

De adquirirse el terreno en estos días, tardará por lo menos otro mes en que pueda habilitarse para evitar contaminación al subsuelo; al menos tres meses para conseguir todos los permisos ambientales.

Así que, turistas y capitalinos tendrán que soportar unas fiestas de “Muertos” entre hedor, basura e incapacidad municipal.

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