Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., a 18 de septiembre de 2023.- Con el “golpe de Estado” aplicado contra Elizabeth Sánchez González, los morenistas se dieron prácticamente un tiro en el pie… para beneficiar a los priistas.
Por primera vez en su historia, el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), enfrenta un cisma, pero del que salió perjudicada una mujer, paradójicamente la que hizo también historia en el organismo, al ocupar el cargo tradicionalmente designado para varones.
Más paradójico que, bajo el argumento de que habría desviado recursos públicos, sin que hubiera juicio de por medio y mucho menos análisis riguroso del caso ni beneficio de la duda, halla sido contra quien se ha distinguido por militar en la izquierda y ha tenido que enfrentar a los priistas en el IEEPCO, que ahora la vencieron, temporalmente, con la ayuda de los morenistas y muy probablemente del gobierno.
¿Otra vez la administración estatal privilegiará a los tricolores, pese a su largo pasado de corrupción? Porque al menos ese fue el resultado de la mala jugada en contra de la presidenta del Consejo General, suspendida ahora por un mes y abandonada por sus compañeros, incluyendo los integrantes del Consejo.
MÉRITOS VS. CORRUPCIÓN
Como en su momento lo reseñó ZONA ROJA, Elizabeth Sánchez aprobó todos los filtros de examen del Instituto Nacional Electoral; fue elegida por unanimidad y pasó a la historia como la primera mujer en encabezar el órgano electoral en Oaxaca.
Tomó posesión del cargo el 27 de octubre de 2021 y suplió a Gustavo Meixueiro Nájera-Luis Miguel Santibáñez, dupla que durante todo el lapso de su encargo estuvo plegada a los designios de los gobernantes priistas.
Pero además, formaron sus propios cuadros y tuvieron el tino de dejar encargados a sus propios consejeros —como es el caso de Alejandro Carrasco Sampedro, sin carrera electoral ni examen para el cargo, salvo la de vocero—, para impedir maniobrar a quien llegara a suplirlos.
Pero sobre todo para que no se indagara la cauda de corrupción, en la que esos cabecillas fueron beneficiados por varios años con millones de pesos a través de supuestas licitaciones que ganaban sus recomendados, a cambio de repartir las ganancias.
O cómo explicar, sólo por un ejemplo, contratos de 20 millones de pesos un monitoreo informativo durante un proceso electoral, cuando en cualquier lugar no costaba ni la mitad.
Esas y múltiples irregularidades dejaron a su paso, a cambio de favorecer con dinero a sus padrinos, pero, paradójicamente, hoy ese grupo político priista regresa al poder, con ayuda de los morenistas, que supuestamente simpatizan con la izquierda.
LA ESTOCADA
Fue el pasado 13 de septiembre en que se comenzó a difundir masivamente el probable desvío de recursos por casi 20 millones de pesos y luego la suspensión temporal que pidió “fast track” el titular de la Contraloría Interna, Salvador Alejandro Cruz Rodríguez, sin dar a Sánchez González el derecho de legítima defensa.
Según los documentos filtrados a los medios de comunicación, en la auditoría practicada al Proceso Electoral 2022, se realizaron 56 observaciones y recomendaciones, las cuales corresponden a un monto total por 50 millones 776 mil 644.23 pesos.
De ello, 19 observaciones fueron solventadas, 22 más fueron parcialmente satisfechas y 15 no fueron solventadas, mismas que ascienden a la cantidad de 19 millones 975 mil 117.32 pesos.
En el informe se precisa que de las 19 observaciones solventadas, 11 se relacionan con materia de adquisiciones, pues no se presentó la documentación justificativa correspondiente.
“Además de lo anterior, se detectó entre otras cosas, que la Consejera Presidenta del OPLE Oaxaca no lleva a cabo sus licitaciones con apego a la normativa estatal vigente en materia de adquisiciones, pues a pesar de las múltiples observaciones que le realizó el Órgano Interno de Control, utiliza como cuerpo normativo un reglamento en materia de adquisiciones en el que se establecen montos mínimos y máximos a modo”, se dio a conocer.
Por supuesto ni ese día ni los subsecuentes hubo esa llamada sororidad —de la que tanto presumen las feministas consejeras del IEEPCO— ni de los demás integrantes del órgano electoral. Prácticamente la dejaron sola, en un plan con maña urdido desde fuera de la entidad con apoyo gubernamental de Oaxaca.
LOS BENEFICIADOS
La misma noche del 14 de septiembre se citó a una sesión extraordinaria del Consejo General y ya todo estaba urdido para que Alejandro Carrasco fuera el sustituto de Elizabeth Sánchez González. De hecho, él mismo lo había filtrado a algunos medios allegados, que benefició durante el periodo de Gustavo Meixueiro.
En una sesión de una hora, en que todo mundo halagó al próximo responsable del IEEPCO, se consumó por unanimidad la imposición de Carrasco Sampedro; sólo algunos atisbos de inconformidad de representantes partidistas del PAN y del PRD.
Nadie, por supuesto, recriminó la escasa preparación electoral del ahora responsable, por un mes, del Consejo General; las consejeras priistas, también prácticamente aplaudieron la determinación tomada por unanimidad.
Nadie, por supuesto, reparó que con esa decisión, aún así sea temporal, se dio un tanque de oxígeno a los tricolores a los que Elizabeth Sánchez enfrentó y, al parecer, no pudo vencer.
Por supuesto, a la consejera suspendida le faltó también elegir un mejor equipo de trabajo e incluso aceptó la imposición, por recomendación, de personajes que ya habían laborado en el IEEPCO, como es el caso de la responsable administrativa, e incluso tenían señalamientos de corrupción.
Y claro que durante casi dos años, tampoco pudo maniobrar políticamente para poder ejercer a plenitud la presidencia y minar a las fuerzas opositoras heredadas.
Y en juego están justamente en estos días las licitaciones millonarias para los próximos comicios, en que los priistas pretenden de nuevo incidir para beneficiarse económicamente a través de sus allegados, factureros y proveedores.
¿QUÉ VIENE?
¿En dónde están aquellas y aquellos que se desgañitaron y se congratularon por la designación de la primera mujer en el IEEPCO? Ni desde el organismo ni desde ninguna institución ni desde la sociedad civil responden en solidaridad.
Que se proceda como corresponda si hay desvío de recursos y contra él o los responsables, pero la del pasado 13 de septiembre fue una mala decisión, porque debilita al órgano electoral y mina la confianza ciudadana.
Peor aún al haber iniciado ya el proceso electoral 2023-204, el 8 de septiembre, en que se elegirán diputados locales y presidentes municipales por el régimen de partidos políticos.
Es bastante probable que Elizabeth Sánchez González regrese al cargo el próximo mes, pero ya no será lo mismo. Priistas y morenistas, aliados de siempre, pretenderán acotarla más y controlarla.
Y no es gratuito, pues buscan controlar hasta las licitaciones. ¿Y el gobierno de la Cuarta Transformación que encabeza Salomón Jara Cruz? Guarda sospechoso silencio. ¿O es el inicio de una andanada de algunos funcionarios para apoderarse de todo el órgano electoral?
