Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México, a 27 de octubre de 2023.- Los saqueos estallaron en Acapulco, Guerrero, luego de que la zona -uno de los destinos turísticos más importantes del país- fuera azotada el miércoles por el potente huracán Otis, que dejó decenas de fallecidos y a los sobrevivientes lidiando con la escasez de agua, alimentos y combustible.
Hasta el momento, se cuentan 27 personas fallecidas, cuatro desaparecidas y daños estimados en hasta 15,000 millones de dólares. Y, aunque ya se registran saqueos y ‘rapiña’ en diversos centros comerciales afectados por Otis, el presidente Andrés Manuel López Obrador indicó que no se implementará toque de queda en la zona.
ROBAN DE TODO
«La gente se robaba todo de los Oxxo, Coppel, Elektra», dijo a Reuters Erick Lozoya, un mago de 26 años quien estuvo hospedado en un hotel de Acapulco cuando el huracán azotó la zona. «Te hablo desde pañales, leche, sopas hasta refrigeradores, pantallas, motos», agregó.
«Venimos a sacar comida para comer porque no hay», dijo a una mujer, quien solicitó el anonimato, a las afueras de un supermercado en Acapulco.
Muchas personas aún buscaban a sus seres queridos e ignoraban si estaban muertos o si no tenían señal de teléfono.
TOQUE DE QUEDA
«La gente estaba llevando a cabo en algunos lugares actos de saqueo», dijo el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
«Es que había una situación de emergencia, de desorden, de caos, de mucha incertidumbre, miedo, todo esto que sucede cuando hay una tragedia de estas dimensiones», agregó. Ahora ya hay retenes de la GN, ya se establecieron estos retenes para mantener el orden”, indicó AMLO, pero descartó la implementación de un toque de queda.
El viernes, personal del Gobierno y efectivos militares retiraban postes eléctricos, árboles y restos de edificios y mobiliario urbano de las calles de Acapulco que aún lucían devastadas. Pobladores luchaban con palas para remover el lodo.
Unos 10,000 integrantes de las Fuerzas Armadas, trabajadores sociales y empleados de la estatal eléctrica CFE fueron desplazados a la zona afectada, en el estado sureño Guerrero, uno de los más pobres del país.
RESTABLECER SERVICIOS
La CFE informó la noche del jueves que había repuesto el 50% del servicio eléctrico en Guerrero al medio millón de usuarios que resultaron afectados por los cortes de electricidad.
Acapulco, hogar de unos 850,000 habitantes, recibe cada año alrededor de 4.5 millones de turistas, la gran mayoría locales.
El huracán dejó afectaciones en el 95% de los hoteles de la ciudad, estimaron desde la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM), quienes solicitaron un plan del gobierno federal para recuperar la zona lo más pronto posible.
Para atender la demanda de gasolina, el Gobierno envío un barco con combustible, aunque todavía resulta complicado asegurar el abastecimiento del carburante por la falta de electricidad en las estaciones de servicio. Dos buques se dirigen a Acapulco con plantas purificadoras de agua y eléctricas.
El jueves, a 48 horas de que el Huracán categoría 5 ‘Otis’ tocara tierra, la denominada punta o zona ‘Diamante’ se encontraba devastada y en espera de que las autoridades llegara a ayudarlos.
Por lo que la opción para entrar a Acapulco era por el Viaducto ‘Diamante’, pasando por la caseta de ‘Metlapil’ y llegar a la zona Diamante, donde la rapiña de tiendas departamentales y de conveniencia han sido saqueadas casi en su totalidad. Se pudo observar a personas que no solo optaron por saquear productos de la canasta básica, sino que se les veía cargando televisores de 50 o más pulgadas, señaló en un fotorreportaje Cuartoscuro.
(Con información de Reuters y Cuartoscuro, en “Expansión Política”)