Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., a 27 de noviembre de 2023.- Ni siquiera ha cumplido los dos años en la Rectoría de la UABJO, impuesto por los priistas Alejandro Murat y José Manuel Vera Salinas, y ya Cristian Éder Carreño, de la mano del morenista Noé Jara Cruz, se autorreeligió por otros dos años.
Sí, es el mismo que limpiaba las cuentas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública del sexenio anterior –y de otros municipios y gobiernos– , por lo cual mantiene una larga amistad y de negocios con Vera Salinas; es el mismo que ahora, sin importar el monto del recurso institucional, “convenció” al Consejo Universitario para seguir otros dos años al frente de la Universidad, así se haya pasado por encima la Ley Orgánica.
Sí, es el mismo que no ocultaba sus ligas con Vera Salinas y con Alejandro Murat a la hora de prestar “porros” para la causa que fuere, así sean actos políticos; sí, es el mismo que ahora presta “porros” para actos del partido cuyo lema es “No robar, no mentir y no traicionar al pueblo”.
Echó a pelear a la familia del cacique mayor de la UABJO, Abraham Martínez Alavés, y no le importó generar pleitos, con tal de presentarse ante el gobernador Salomón Jara Cruz, vía recomendación de Noé, como el idóneo para mantener la calma universitaria… lo que está por verse.
REELECCIÓN ILEGAL
En año y medio, Cristian Éder Carreño no ha hecho absolutamente nada por la Universidad, más que relaciones políticas y acercamiento de puertas abiertas con los morenistas, con tal de congraciarse con ellos y tratar de quitarse el tufo priista.
La única obra que se le recuerda es la colocación de torniquetes en los accesos principales a Ciudad Universitaria… pero desde que los colocaron hace meses, no sirven.
Como se ha reseñado en este espacio, fue Abraham Martínez Alavés quien presionó al grupo universitario de su hijo Eduardo Martínez Helmes, para que dejara el poder, cuya rectoría presidía Eduardo Bautista Martínez.
Al no querer ceder el vástago, el llamado “cacique universitario” presionó de múltiples formas, incluyendo encarcelamiento para su hijo Eduardo, con aval de Murat, con tal de imponer Éder Carreño como rector por dos años, y a Abraham Martínez Helmes como secretario General, con la mira de imponer a este último como rector por los siguientes cuatro años.
Así fue como se consumó la imposición, sin proceso electoral de por medio, como lo marca la ley, y únicamente bajo una supuesta sesión del Consejo Universitario.
A principios de la semana pasada, a petición de Noé Jara, el gobernador Salomón Jara recibió a Cristian Éder Carreño en el Palacio de Gobierno, junto con varios directores de escuelas y facultades de la UABJO; ahí se habría consumado el “dedazo”.
El miércoles 22 de noviembre se comenzó a divulgar un documento en que se convocaba a una sesión extraordinaria del máximo órgano universitario y desde ahí ya se advertía la imposición:
“4.- Revisión, análisis y aprobación del Honorable Consejo Universitario acerca del encargo del Licenciado en Contaduría Pública Cristian Éder Carreño López como Rector Sustituto de la Universidad Autónoma ‘Benito Juárez´ de Oaxaca”.
Y fue el pasado viernes 24 de noviembre finalmente en que, a puerta cerrada, en la Facultad de Arquitectura 5 de Mayo del centro de la ciudad, se llevó a cabo la supuesta asamblea del Consejo Universitario, para la reelección.
LA LEY
De acuerdo con el artículo 47 de la Ley Orgánica, “El rector interino concluirá el periodo de rector ausente. Si la ausencia ocurre después de tal periodo, el Consejo Universitario designará rector sustituto, quien terminará el periodo correspondiente”.
El artículo 48 refiere: “Quien haya desempeñado el cargo de rector en las circunstancias previstas en el artículo anterior, en ningún caso y por ningún caso podrá volver a desempeñar ese cargo en el periodo inmediato sucesivo”.
Así que Cristian Éder Carreño lleva dos violaciones a la Ley Orgánica de la UABJO; la primera al promover su elección hace año y medio sin proceso electoral de por medio, menospreciando el voto universal de los universitarios.
La segunda, el viernes pasado, en que “convenció” a la mayoría de consejeros universitarios para seguir en el cargo por otros dos años, también sin proceso electoral, y sin que haya cumplido el lapso por el cual fue electo, pero además, violando la Ley Orgánica.
LOS PLEITOS
La reelección en la rectoría ha sido precedida de pleitos, como las amenazas contra la hija de Abraham Martínez Alavés, Rocío, actual directora de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.
Como el pleito del patriarca y división de la familia a causa del subsecretario en la Secretaría de Gobierno, Carlos Perezcampos Mayoral, esposo de Rocío Martínez Helmes, quien confirmó por escrito que lo recomendó para ser funcionario en el gobierno de Salomón Jara.
Como el creciente número de “porros” –y de espacios– que Carreño López ha “prestado” a quien se lo solicite, incluido para eventos políticos, como fue el caso del informe del diputado Luis Alfonso Silva Romo y luego del mandatario estatal, en que incluso se usaron autobuses oficiales universitarios.
Como la denuncia desde hace varias semanas en contra de la directora de la Facultad de Bellas Artes, que derivó la semana pasada en protestas, y que no ha sido atendida por el rector.
Indudablemente que no todo es miel sobre hojuelas en la máxima casa de estudios de Oaxaca y apenas viene la reacción de los sindicatos, con el pretexto de las revisiones salariales y contractuales.
Y Abraham Martínez Alavés, que dijo que se retiraba en definitiva de su participación en la UABJO, como virtual cacique, no se ha ido, ni se irá. Está a la caza de una nueva oportunidad de imponer a Abraham Martínez Helmes como rector. Y podría ser antes de que culminen los otros dos años de Cristian Éder Carreño.
