Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México, a 24 de diciembre de 2023.- La plaza Manger de Belén es un estacionamiento fantasma. Las calles que la rodean sólo son ruinas de casas. En el centro, la iglesia de la Natividad, a la que se rinde culto como lugar de nacimiento de Jesucristo y es visitada por más de un millón de peregrinos cada año, está virtualmente vacía.
La única señal de vida es el llamado de las campanas a una misa a la que nadie acudirá. Una de las ciudades más sagradas de la cristiandad está en duelo profundo y doloroso.
“Nunca hemos visto a Belén así”, comenta el padre Issa Thaljieh, el párroco griego ortodoxo de la iglesia, mientras otros sacerdotes musitan plegarias al fondo.
Por lo regular, poco antes de Navidad, la plaza central de Cisjordania ocupada debe estar coronada por un árbol deslumbrante, cerca de un Nacimiento monumental. Niños y niñas exploradoras entonan canciones navideñas en inglés y árabe.
CANCELAN VIAJES
Miles de visitantes de todo el planeta se agolparían en la ciudad en una enorme fila para visitar la gruta y rendir tributo al lugar donde se dice que Jesús nació. Pero este año, con una guerra devastadora en Gaza, no hay nada de eso. Los militares israelíes también han cerrado el principal puesto de revisión a la entrada de Belén, aduciendo razones de seguridad para evitar el acceso a la ciudad famosa para muchos palestinos.
SIN CELEBRACIÓN
“No podemos celebrar cuando muchos nos sentimos tristes y atemorizados por lo que ocurre en Gaza”, comenta el padre Thalijeh. Expresa preocupación por sus parroquianos en el minúsculo enclave sitiado, quienes ahora se concentran temblando de miedo en las iglesias católicas y ortodoxas de la ciudad de Gaza, bajo el bombardeo israelí más intenso en la historia.
“Este año, dijimos: es mejor juntarnos, unirnos en oración… no podemos celebrar. Todo lo que podemos hacer es enviar un mensaje, el mismo que ha salido de aquí desde que Jesús nació, uno de paz y amor.”
Detrás de él, preparándose para la misa, el padre Spiridon, de 75 años, también griego ortodoxo, está de acuerdo. “Llevo 54 años aquí. Nunca había visto una Navidad como ésta, ni siquiera con el covid. Nadie puede entrar”, lamenta mientras un puñado de locales encienden velas en el fondo.
“La Navidad se trata de amor y paz y ése es nuestro mensaje: debemos tener paz en Tierra Santa”.
CRUENTA GUERRA
Israel ha impuesto un estado de sitio paralizante y un feroz bombardeo aéreo sobre Gaza en represalia por el ataque de Hamas el 7 de octubre dentro del territorio israelí, en el que militantes mataron a mil 200 personas y capturaron 240 rehenes. Desde entonces, el ministerio de Salud de Gaza, gobernada por Hamas, afirma que los ataques israelíes han dado muerte a más de 20 mil palestinos, de los cuales tres cuartas partes eran mujeres y niños. 85 por ciento de los 2.3 millones de residentes han sido desplazados y viven con acceso decreciente a comida, agua y suministros médicos.
El grupo militante palestino informó ayer que más de 200 habitantes murieron en las 24 horas previas al reporte por los incesantes bombardeos y la operación terrestre. Los ataques aéreos de antier arrasaron una vivienda en ciudad de Gaza, donde 76 personas de la familia Al Mughrabi perdieron la vida, informó la agencia noticiosa Ap.
(Información de “The Independent” en “La Jornada”)