Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México, a 24 de agosto de 2024.- Este viernes por la tarde, un grupo armado atacó a una familia de turistas estadounidenses en el kilómetro 220 de la carretera que conecta Sonoyta con Caborca.
El ataque resultó en el fallecimiento de dos mujeres, Enedina ‘N’ y Hubandina ‘N’, de 72 y 64 años, residentes de Arizona, Estados Unidos.
Primeras versiones refieren que los hechos ocurrieron cuando delincuentes intentaron detener el vehículo Nissan Pathfinder en el que viajaban los turistas.
Al resistirse, los atacantes abrieron fuego contra la camioneta, lo que hizo que la conductora perdiera el control y el vehículo se volcara fuera de la carretera.
Aprovechando el caos del accidente, los agresores robaron las pertenencias de las víctimas antes de huir.
Otra persona que viajaba en la camioneta logró sobrevivir al ataque, aunque resultó herida. Informó que los asaltantes dispararon repetidamente al vehículo al no poder detenerlo, lo que provocó la pérdida de control y el fatal desenlace.
Las fuerzas de seguridad, incluyendo la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la policía estatal y personal pericial, acudieron al lugar para realizar las investigaciones pertinentes.
Sin embargo, mientras se encontraban en la escena, se produjo otro tiroteo en San Luis Río Colorado, en los límites entre Sonora y Baja California.
Leopoldo Tizoc Aguilar Durán, secretario de Seguridad Pública de Baja California, dijo a medios de comunicación que tras esa persecución hubo tres personas detenidas, una de ellas, lesionada y cinco armas confiscadas.
Mencionó que tanto el C4 de Sonora como el de Baja California tuvieron información respecto a la agresión de San Luis Río Colorado.
Tras el aseguramiento de las tres personas presuntas delincuentes, fueron trasladadas al Ministerio Público Federal en Sonora para que determinen su situación legal.
Hasta el momento, las autoridades sonorenses no han revelado más detalles sobre los hechos, pero el secretario de Baja California afirmó que se ha reforzado la seguridad en la zona, en coordinación con la Guardia Nacional y la Sedena, para evitar futuros incidentes.
(Información de “El Financiero”)
