Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca, Oax., a 2 de septiembre de 2024.- Apenas una semana y media después de iniciado el ciclo escolar 2024-2025, la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación ya se apresta a parar labores y protestar.
Para ello, desde este domingo comenzó a circular una convocatoria en que se pide participar en la movilización del 25 por ciento de su membresía, el próximo miércoles, para dar cobertura a una reunión tripartita, SEP-IEEPO-Sección 22.
Nunca quedará satisfecho el magisterio respecto a sus demandas económicas, porque es su génesis; en realidad, así por más de 44 años han obligado a gobiernos de todos los partidos, a cumplir sus demandas, así sean caprichos.
Pero con todo ello, la gremial, que ahora encabeza una mujer por primera vez, Yenny Aracely Pérez, no puede poner orden en su vida interna; la inhabilitación de alrededor de 118 docentes, de la ex dirigencia, ha movido a muchos de ellos a la decisión de iniciar una batalla.
Mientras tanto, los cabecillas del anterior Comité Ejecutivo Seccional, Eloy López Martínez, Genaro Martínez Morales y José Carlos López Alonso, viven como reyes; no, viven como millonarios, gastando su fortuna en propiedades, sin que nadie los pueda llevar ante la justicia.
LOS COPTADOS
Como ya se ha detallado en este mismo espacio, el comité que encabezó Eloy López Hernández estuvo casi seis años en el cargo, dos más que los cuatro estatutarios, justamente el sexenio del ex priista Alejandro Murat Hinojosa.
La razón que se esgrimió es que, a causa de la pandemia del Covid-19, no se podía hacer una asamblea general para nombra a la nueva dirigencia.
Eso además aprovechó el comité para impedir toda clase de movilizaciones de las que acostumbra la gremial, como las marchas, “toma” de oficinas, cierre de vialidades, por cualquier pretexto.
Así, Eloy López Hernández y su camarilla, de hecho reducida a tres personajes, pudieron maniobrar y controlar todas las manifestaciones para no molestar al gobierno del priista, ahora morenista, a cambio de prebendas.
Fue hasta finales de noviembre de 2022, justo el fin de sexenio de Murat hijo, en que el magisterio pudo elegir a su nueva dirigencia, que recayó en Yenny Aracely Pérez Martínez, quien comenzó su cargo con ánimos de lucha y de recuperar la fuerza sindical.
También, a finales de ese año, durante el precongreso de la Sección 22, se tomó la determinación de iniciar una revisión del actuar del Comité Ejecutivo anterior.
Sin embargo, les tomó otro año conformar la Comisión de Honor y Justicia para iniciar el proceso de análisis de los casos en contra de quienes se acusa de probables actos de corrupción.
Y de nueva cuenta, dicha comisión tardó ocho meses para determinar una inhabilitación, a todas luces ilegal, pero de toda la estructura de la ex dirigencia, tuvieran o no responsabilidad.
LA PROTESTA
A principios de agosto pasado, la Comisión de Honor y Justicia dio a conocer, a través de los canales de información institucional, la larga lista de inhabilitados, con nombre y apellido, únicamente por ser parte de dicha dirigencia sindical.
No hubo, o no se conocen, los argumentos suficiente para considerar que todos fueron corruptos.
Por lo menos eso es lo que denunció hace dos semanas un grupo de ex miembros de la dirigencia, encabezados por quien fungió entonces como secretario de Prensa y Propaganda, Wilbert Santiago Valdivieso.
La determinación, que no pasó por la Asamblea Estatal, incluyó a todos los organismos auxiliares.
“En atención al Oficio No. 199 de la Comisión de Honor y Justicia nombrada en la Asamblea Estatal del 02 de diciembre de 2023, se comparte el Comunicado de inhabilitación sindical-oficial temporal de los integrantes del Comité Ejecutivo Seccional y de los organismos no estatutarios: CETEO, ICN, CENCOS 22, CEPOS 22, CEDES 22, COMADH, Cuerpo Jurídico y Espacios Ganados por el MDTEO, del periodo 2017-2022”, informó vía sus redes sociales.
Dos meses antes, la misma comisión había emitido un comunicado para recibir “denuncias por escrito sobre el actuar del Comité Ejecutivo de la Sección XXII del periodo 2017-2022, del 25 de junio al 25 de julio”.
No es que en este espacio se defienda o se quiera defender a la anterior dirigencia sindical, pero con dicha determinación, afectaron a muchos docentes que no tuvieron la facilidad de volverse millonarios de la noche a la mañana.
Como es el caso de Eloy López Hernández, Genaro Martínez Morales y José Carlos López Alonso, a quienes parece que la justicia no alcanzará.
Por lo menos esos tres nombres citó su ex compañero sindical Wilbert Valdivieso, durante la conferencia de prensa que encabezó hace dos semanas, donde habló de múltiples irregularidades que habrían cometido el trío de ex dirigentes.
¿Y LOS LÍDERES?
Ex dirigentes que, de acuerdo con los propios docentes de la Sección 22, son multimillonarios e invierten lo logrado en el sexenio priista en comprar propiedades inmobiliarias y poner negocios.
Por ejemplo, Eloy López tuvo la facilidad de ser presidente municipal de su natal San Juan Teita, apenas concluyó su encargo, algo que está prohibido en sus estatutos.
Disfruta de su riqueza, aunque de manera más discreta; la justicia no prevé alcanzarlo y tiene ya suficiente dinero para sus próximas generaciones.
El que no dismula en absoluto su riqueza es Genaro Martínez Morales, ex secretario de Organización.
Pues también de acuerdo con los propios maestros y de sus paisanos de Tlacochahuaya, apenas regresó a su modesta casa, la remodeló hasta ponerle tres niveles, con terraza de lujo incluida.
Luego se ha dedicado a comprar parcelas de siembra y múltiples propiedades en esa misma población, distante apenas a unos 20 kilómetros de la capital.
Se compró un hotel y está por abrir otro, además de invertir dinero en otras propiedades en la ciudad de Oaxaca.
¿La justicia alcanzará a los tres señalados? De una vez les decimos que no. Porque hasta el momento no se ha comprobado —y dudamos que se compruebe— que malversaron dinero de la Sección 22 del SNTE.
En ocasiones anteriores, el gobernador Salomón Jara Cruz ha señalado que recibieron muchas prebendas del ex mandatario Murat Hinojosa para no movilizar al magisterio.
En tanto que, supuestamente, los ex dirigentes habrían desviado alrededor de 73 millones de pesos de pagos a terceros.
En realidad, lamentamos decirles que no hay nada formal en ello. Porque si recibieron millones de pesos de Alejandro Murat, fueron a fondo perdido, en efectivo y sin papeles de por medio. Eso sí, quizá algún día surjan los videos.
De los posibles desvíos de dinero del magisterio, ni siquiera en la Asamblea General se ha discutido esa posibilidad.
Por lo tanto, de seguir procediendo el proceso en contra de ellos, lo único que determinaría la Asamblea sería la aplicación del principio rector 20, es decir, la expulsión de las filas del magisterio. Nada más.
¿Hay investigación penal en contra de ellos? No. Lo que sí tiene el comité que encabeza Yenny Aracely Pérez es un enorme problema interno… que cubrirá con más marchas y plantones por cualquier motivo.