Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 17 de febrero de 2020.- Sus contrarios lo consideran enemigo político natural para la gubernatura de Oaxaca por su cercanía con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y quizá por ello, en las últimas semanas han surgido señalamientos de presuntos actos de corrupción en contra de Adelfo Regino Montes, indigenista de cepa.
“Cobra ‘moches’ de 10 y hasta 15 por ciento a constructoras, para asignar obras. Hay un ejemplo claro: en diciembre del año pasado un funcionario del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) recibió de una constructora como pago final 500 mil pesos por la asignación de una obra de unos cinco millones de pesos; antes, para amarrar compromisos le dieron un vehículo nuevo”, revela una fuente.
Va más allá: el funcionario señalado es Donato Vargas Jiménez y no es la única vez que ha pedido dinero, a nombre del INPI, para supuestas campañas políticas próximas, que algunos deducen sería de Adelfo Regino.
Pero además, Donato Vargas –del equipo político del senador Salomón Jara Cruz–, recorría comunidades de diversas regiones del estado haciendo proselitismo político, previo al proceso de elección del comité ejecutivo del Partido Morena.
La semana pasada, en tribuna de la Cámara de Diputados federal, la legisladora por el Partido del Trabajo, Margarita García García, lanzó otra acusación: En el municipio de San Mateo Tlapiltepec, región Mixteca, hay un posible desvío de recursos en los trabajos de construcción de un camino de acceso, por parte del INPI.
Personal de esa dependencia está pidiendo dinero porque supuestamente ellos gestionaron la obra y hay nombre: Jorge Santiago.
“Doy a conocer esta denuncia por si algo me llegara a suceder o a mi familia los responsabilizo a ellos, y ojalá el titular del INPI, Adelfo Regino Montes, haga caso de las denuncias frecuentes que han hecho contra la señora Luz Irene, quien está promoviendo la corrupción y que condiciona a los presidentes municipales”, dijo Margarita García, del equipo del también diputado Benjamín Robles.
EX ASESOR DEL EZLN
Regino Montes es originario de Santa María Alotepec Mixe; comenzó a destacar en la actividad pública tras la irrupción del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en el estado de Chiapas, en 1994.
Por considerar que tenía calidad moral y conocía el entramado indígena, fue llamado por el grupo armado como su asesor, donde participó de manera abierta en las mesas de negociación con el gobierno federal.
Por cierto, fue el EZLN quien le puso las primeras dificultades el año pasado al frente del INPI.
“Las diferencias entre el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se subsanarán con el “lenguaje de los hechos”, cuando se retomen los Acuerdos de San Andrés. Dijo hace un año a la Agencia Proceso.
Tras amainar el conflicto por el surgimiento del grupo guerrillero, fortaleció la organización Servicios del Pueblo Mixe (SER), desde donde asesoraba a comunidades de la región de la Sierra Juárez y de otras zonas de la entidad.
Colaboró de manera discreta en la campaña política de Gabino Cué Monteagudo y el 1 de diciembre de 2010 fue designado como secretario de Asuntos Indígenas; renunció al cargo poco después de la agresión armada contra maestros y pobladores en Asunción Nochixtlán, en junio de 2016.
Antes de ello, en un hecho que asegura fue de congruencia personal, renunció por unos meses al inicio del 2011, para terminar su licenciatura en Derecho, pues era uno de los requisitos impuestos por ese gobierno
Se sumó después a López Obrador en la asesoría en materia indígena y en agosto de 2018, tras el triunfo de AMLO, se anunció la creación del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas y ahí mismo el nombre del titular: Adelfo Regino.
¿CANDIDATO NATURAL?
Los tropiezos del oaxaqueño originario de Alotepec no han sido pocos, al igual que sus logros; lo primero, la resistencia de comunidades indígenas, sobre todo del sur-sureste del país, incluyendo Oaxaca, para aprobar los megaproyectos de López Obrador, como el Tren Maya.
O como el transístmico de Oaxaca y Veracruz, del cual hay fuertes oposiciones, que se ahondarán este año con el millonario presupuesto ya autorizado. Con el mismo EZLN, Adelfo aún no termina de cuadrar el diálogo.
Los éxitos, el diálogo abierto que mantiene el Presidente de México con los más de 60 pueblos originarios, a los que está visitando cada fin de semana, acercamiento inédito que esperemos concluya con el abatimiento del grave rezago social.
Los caminos pavimentados de manera artesanal, con recursos que se etiquetan directamente al ayuntamiento, y a que a un año, hasta ahora prácticamente no tienen críticas; al contrario, son bandera de ejemplo del mandatario en cada acto en las comunidades.
Esto es lo que justamente comenzó a generar urticaria en los círculos políticos de Oaxaca; es el candidato natural, consideran muchos, de todos los partidos, incluyendo de Morena, que por cierto tiene múltiples divisiones.
De los señalamientos de corrupción, el propio INPI precisa que Donato Vargas fue reconvenido para evitar mezclar el proselitismo con su actividad pública en el INPI.
Tanto así que el 30 de septiembre, de acuerdo con un oficio en poder de ZONA ROJA, Donato presentó su renuncia al cargo:
“A partir de esta fecha, es mi voluntad irrevocable dar por terminada la relación de trabajo que me unía con el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, por cuestiones inherentes a mi persona. En consecuencia de lo anterior, renuncio al puesto de trabajo que venía ocupando, nivel M21, plaza 3538 como Director de Área Eventual en Dirección General del INPI”, refiere la misiva con la firma de Donato.
“Si el presunto hecho de corrupción ocurrió en diciembre, el aludido ya no estaba en el Instituto”, refuerza Adelfo Regino. En el caso de la acusación de la diputada Margarita García, expone que está abierta una investigación para deslindar responsabilidades.
“Yo estoy dedicado a trabajar, estoy totalmente comprometido con mi trabajo y en absoluto estoy haciendo recorridos proselitistas, tampoco mis colaboradores, refuta el titular del INPI.
Pero, con la cercanía y afecto que le tiene López Obrador, ¿alguien puede darlo por muerto?
Próxima semana: Se acabó el sexenio de Alejandro Murat; Benjamín Robles y sus ambiciones personales.