Yuridiana Sosa/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 7 de julio de 2020.- Pese a estar involucrada por los familiares y uno de los sobrevivientes, la Síndica de San Pablo Huitzo, Martha Isabel Hernández, se ha querido deslindar del delito homicidio e intento de homicidio, hace mes y medio, de dos jóvenes.
Familiares revelaron que se asumió también como víctima de los delitos y presuntamente el ex rector de la UABJO –con quien lo vinculan sentimentalmente –ha abogado por ella ante la Fiscalía General del Estado de Oaxaca.
Con reticencias, finalmente pidió licencia al cargo y posteriormente acudió a declarar ante el Ministerio Público, en que reiteró que es inocente de los delitos de homicidio e intento de homicidio.
Diego, de 20 años de edad, perdió la vida por una golpiza en la que participaron elementos de la Policía Municipal de San Pablo Huitzo, en probable complicidad con pobladores y la síndica municipal. Pero sólo hay un policía detenido por los hechos del pasado 7 de mayo.
Según lo han narrado, la tragedia para Diego y su hermano Juan Jaziel (o Jaciel) Luna Paz comenzó la noche del 6 de mayo, cuando de regreso a su casa en la cabecera de Huitzo fueron interceptados por pobladores, familiares de la síndica Martha Isabel Hernández Hernández, quienes los intentaron golpear y posteriormente privados de su libertad por policías municipales.
Juan Jaziel narró la pesadilla que vivió junto a su hermano, culpado de actos que hasta el momento desconoce o motivos para el abuso y uso excesivo de la fuerza contra ellos.
Cerca de las 23:30 horas, mientras caminaban en la calle conocida como los Sabinos, un vehículo tipo Versa, color vino con franjas blancas, los interceptó y descendieron varios sujetos con palos y tubos.
“Ya ching#@&$#@?*&$$”, les gritaron, al tiempo que los jóvenes corrieron, pero los alcanzaron y propinaron una primer golpiza. En el hecho, se reconoció la participación de Omar Caín Paz Cruz, quien lazó al suelo a Jaziel y otro sujeto conocido como «El Profe» y Ever, quien detuvo a Diego.
Los jóvenes dejaron de ser golpeados por los sujetos a los gritos de unas señoras. Ellos regresaban de cenar y devolver una bicicleta prestada a Diego y por lo que se vieron obligados a transitar a esas horas de la noche, a pie.
LLEGAN A MANOS DE LA SÍNDICA
Luego de librar lo que pudo ser una peor golpiza, los jóvenes tras resguardarse por unos minutos en casa de una tía, decidieron regresar a casa, pero en su trayecto los privaron de su libertad.
Una patrulla municipal, con ocho elementos a bordo, los interceptó en la avenida Vía Central, cerca de su casa. Los detuvieron, esposaron y subieron a la camioneta.
Jaziel preguntó el motivo de la detención y el elementos Abraham Felipe Martínez Ignacio le respondió, «por rateros hijos de su pu##$#@##”, para después presentarlo ante la síndica municipal.
Casi de forma simultánea a su llegada, a las oficinas de la síndica arribó una mujer identificada como Martha Alicia Bolaños y su hijo Jesús Eduardo Hernández Bolaños.
Ambos llegaron en un vehículo con características similares del coche del que descendieron sus primeros agresores: un auto versa y otro taxi tipo Tsuru color vino con franjas blancas a sus costados.
Según la narrativa de las víctimas, la síndica atendió primero a la mujer y su hijo, mientras los hermanos esperaban, custodiados por elementos policiales.
“Ahí te encargo”, le dijo Martha Alicia a la síndica. Ella respondió: «no te preocupes para eso es la familia», según explican.
Jaziel pidió ayuda a la ciudadana para que pudiera avisar a su padre que se encontraban en ese lugar, pero Alicia respondió: «no puedo, no estés chingando». Fue en ese momento cuando Diego comenzó a llorar ante la difícil situación.
Sin mediar palabras ni cuestionar sobre los supuestos hechos, la síndica se dirigió a ellos sólo para burlarse de Diego. «Y tú, por qué lloras pinche hipócrita» y de inmediato ordenó a los policías la acción violenta.
“Llévenselos y pónganles en la madre ya saben dónde”, indicó la servidora pública, quien regresó a su oficina.
PARIENTES Y POLICÍAS LOS AGREDEN
Los hermanos fueron subidos nuevamente a la patrulla, en la parte de la batea y los amenazaron que si hablaban o intentaban huir les iría peor.
A bordo iba el comandante Abraham Felipe Martínez Ignacio, quien con guantes puestos despojo de sus pertenencias a los jóvenes. También participó en el operativo, el policía identificado como David Hernández Ventura.
La Policía condujo camino al paraje conocido como » El Campamento». Ya pasada de la media noche. Fue un camino con curvas, al menos una docena de ellas antes de llegar a un paraje del poblado de Telixtlahuaca, por la carretera federal en dirección a la Ciudad de México.
En ese sitio ya esperaba a la patrulla otro grupo de hombres que descendieron de un taxi Tsuru, color vino y franjas blancas, entre ellos Jesús Eduardo Hernández Bolaños, hijo de Alicia, pariente de la síndica.
Eduardo ordenó a los elementos policiales bajar a los jóvenes de la patrulla, esposado. Abraham Felipe y David Hernández obedecieron; se unió a la participación dos policías más, que permanecieron encapuchados.
Diego y Jaziel fueron lanzados desde la batea hasta el suelo empedrado, esposados con las manos atrás. Una vez sobre el camino, Eduardo junto con otros hombres los comenzaron a golpear con tubos y palos.
«De una vez hay que matarlos a los hijos de su p&$#@+&)», decía Eduardo mientras golpeaba a los hermanos. La agresión finalizó hasta que los jóvenes dejaron de moverse.
Inconscientes por los golpes, fueron lanzados a un barrando, de donde hasta la mañana del 7 de mayo Jaziel logró recuperar la conciencia, pero su hermano Diego perdió la vida.
Jaziel salió del sitio para pedir ayuda hasta lograr llegar a casa de sus abuelos. Después interpusieron la denuncia en la Fiscalía Especializada en Delitos de Alto Impacto.
SOLO UN DETENIDO
El pasado 25 de junio, el Juez de Control vinculó a proceso y ordenó la prisión preventiva para un ex policía de San Pablo Huitzo, por el homicidio de Daniel y tentativa de homicidio calificado con ventaja en agravio de su hermano, Jaziel.
El detenido fue identificado como L.N.A O., otro que los jóvenes no identificaron durante los hechos, a quien fue detenido en Veracruz el pasado 19 de junio, a más de una semana de darse a conocer el hecho de forma pública por las víctimas.
Bajo causa penal 507/2020ª, al ex elemento se le impuso tres meses de prisión preventiva, y hasta el momento no existe información sobre la situación jurídica contra el resto de los policías implicados, de la díndica municipal y del resto de los ciudadanos involucrados.
