Evlin Aragón/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 18 de febrero de 2021.- Sólo un frente común entre productores, autoridades comprometidas en la generación de programas productivos y solidarios, así como una sociedad civil activa, pondrá freno a la crisis económica a la que se enfrenta nuestro país, incluido Oaxaca, debido a la pandemia por Covid-19.
Así lo señaló Narcedalia Ramírez Pineda, vicepresidenta de la Fundación Ayú, para quien es indispensable dar pasos sólidos en materia económica, ya que las familias mexicanas no podrán aguantar por mucho tiempo más los altos índices de desempleo y el aumento de la inseguridad que trae consigo.
Para la especialista, en la actualidad la economía social y solidaria es un pilar fundamental, es incluso la esperanza de muchas mujeres y hombres que dependen de su vocación productiva y de sus habilidades para no desintegrarse en su comunidad.
Por ello, indicó que es indispensable que las autoridades federales y estatales pasen no sólo de los créditos como apoyo económico ante la crisis, sino generen programas estratégicos para la reactivación de la economía, hasta ahora paralizada por la pandemia.
“Se requieren apoyos que van más allá de créditos, es decir apoyo para hacer sostenibles las iniciativas de los proyectos productivos que requieren de la capacitación y acompañamiento gubernamental, si es que queremos que reactiven la economía”, dijo.
Así mismo, detalló que lo verdaderamente importante en estos momentos es buscar las capacidades productivas de la gente, desde sus pueblos y regiones, en todo el país; así como fortalecer los valores de la solidaridad para respaldar los proyectos locales.
De igual forma, enseñar a las y los emprendedores a administrar su empresa social con eficiencia, aprovechando las nuevas tecnologías y estilos de gestión empresarial que estas proveen.
Ramírez Pineda señaló como clave la Ley de la Economía Social y Solidaria, la cual dijo responde a una exigencia de justicia para quienes participan en un proyecto productivo toda vez que pondera la capacitación para quienes buscan producir, competir, innovar, administrar y estructurar sus propios instrumentos de comercialización.
“Hoy la reactivación económica de diversas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales tiene que sustentarse en un modelo económico alternativo que es la economía social, cuya filosofía nos impulsa a organizarnos para producir con los valores de la cooperación y la solidaridad”, sentenció en entrevista con el medio “Agenda Mediática”.
