Redacción/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 7 de agosto de 2021.- Una enésima explosión e incendio ocurrió en la refinería “Ing. Antonio Dovalí Jaime”, ubicada en Salina Cruz, Oaxaca, sin que Petróleos Mexicanos (Pemex) informe los daños o víctimas humanas.
La fuerte explosión sucedió en los primeros minutos de este sábado, lo que originó temor entre la población de esa ciudad porteña, en la región del Istmo de Tehuantepec.
Hasta el momento la empresa mexicana, bajo responsabilidad de la Secretaría de Energía federal, no ha emitido ningún comunicado al respecto. Tampoco en ocasiones recientes, como en el año 2017 en que ocurrieron al menos dos tragedias, ha detallado las fallas registradas ni cuantificado las afectaciones.
Apenas el pasado 4 de agosto, mediante un comunicado, Pemex cumplió 42 años de operación, “coadyuvando al impulso económico y desarrollo social del sur del país.
“Esta instalación es considerada como estratégica para el abastecimiento de combustibles y destilados del petróleo en el litoral del pacífico”.
De acuerdo con un comunicado de prensa, la creciente demanda de combustibles en los 70 dio origen a la necesidad de construir una sexta refinería, por lo que en 1975 inició su cimentación, siendo inaugurada el 4 de agosto de 1979, procesando en aquellos años alrededor de 165 mil barriles diarios de crudo.
En febrero de 1989 entró en operación el segundo tren de producción, aumentando el proceso de crudo a 330 mil barriles diarios.
La refinería tiene una superficie de 770 hectáreas, integrada por 28 plantas de proceso, 118 tanques de almacenamiento, dos áreas de servicios principales (generadores de electricidad, vapor, aire para instrumentos y tratadoras de aguas).
Su zona de influencia abarca los estados de Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Michoacán, Colima, Sinaloa, Sonora, Baja California Sur, Baja California Norte y Quintana Roo.
Asimismo, tiene capacidad para producir una amplia gama de combustibles y energéticos entre los que destacan: combustible Magna, Premium y Diésel de Ultra Bajo Azufre (UBA), Turbosina, Asfalto, Azufre, Gas Licuado, Propileno y Combustóleo, los cuales cumplen con especificaciones en materia ambiental y con las normas internacionales aplicables.