Redacción/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 9 de noviembre de 2021.- Representantes de las comunidades de Guerrero Grande, Mier y Terán, y Ndoyonoyuji, de San Esteban Atatlahuca, desmintieron que haya habido retorno de desplazados a su lugar de origen, como lo informó la Secretaría General de Gobierno.
Además, reconocieron que hay apoyo de víveres y ayuda humanitaria, pero ha sido insuficiente para el número de familias que han sido exiliadas de sus hogares, tras los hechos de violencia de la última semana de octubre pasado.
“Respecto al punto donde se refiere que hasta la fecha han retornado 75 familias de la agencia de Guerrero Grande, aclaramos que es verdad en parte que estas familias hayan retornado, pero fue en forma provisional para ir a buscar a sus animales que se perdieron durante la agresión armada.
“Pero que no pueden retornar a sus hogares porque no tienen a dónde llegar, ya que sus casas fueron totalmente calcinadas, por lo tanto estas familias se encuentran viviendo en forma inhumana en la iglesia de la comunidad de Guerrero Grande sin servicio de agua potable, alimentación, existiendo un gran número de niños, niñas y ancianos” detallaron.
En un comunicado, precisaron se reconoce la ayuda humanitaria brindada por la Secretaría de Gobierno del Estado de Oaxaca, “mas no es suficiente, ya que son más de 70 familias de la comunidad de Guerrero Grande que se les quemaron sus casas y que se encuentran viviendo unas en la iglesia de la comunidad de Guerrero Grande, y otras familias se encuentran refugiadas en Mier y Terán.
“Y más de 16 familias de la comunidad de Ndoyonoyuji perdieron sus casas siendo desplazados y se encuentran viviendo en las instalaciones el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas en la Ciudad de Tlaxiaco”, manifestaron.
Expusieron que el reconocimiento tácito de la Segego que existe desplazamiento forzado interno de habitantes de las agencias municipales de Ndoyonoyuji, Mier y Terán y Guerrero Grande, conlleva a cumplir con una verdadera ayuda humanitaria como lo disponen los estándares internacionales en materia de desplazamiento forzado interno de personas, que debe de ser, alimentación, salud, educación, y sobre todo protegiendo los derechos de los niños, niñas y mujeres.
Respecto a la vigilancia que refiere la dependencia, “manifestamos que sólo en la comunidad de Guerrero Grande existen elementos del Ejército, Guardia Nacional, y una camioneta de la Policía Estatal.
En tanto que en la comunidad de Mier y Terán no existe elementos de ningún cuerpo policiaco ni militar, por lo tanto los habitantes de esta comunidad viven en un estado de zozobra y miedo por el temor de que sean agredidos.
El comunicado lo firman el Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas A.C. (Cedhapi) y los representantes de las comunidades, Bartolome Barrios Reyes, Carmelita García López, Epifania Reyes Sandoval, Modesta Barrios Sandoval, Jacinta García Barrios y Luis Miguel Barrios Sandoval.