Redacción/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 5 de septiembre de 2019.- Hombre siempre serio y cortante en sus palabras, en los últimos años se volvió amigable y accesible.
De pocas palabras pero siembre afable, Francisco Toledo respondía y bromeaba con los reporteros. Se dejaba tomar fotos desde cualquier ángulo; convivía incluso. En el Instituto de Artes Gráficas que fundó, ofreció en una ocasión un desayuno a la prensa. Regaló y autografió unos cuadernillos.
A nadie le parecía extraño que caminara por las calles como cualquier ciudadano; pocas veces de zapatos, sucios y viejos. Muchas veces de huarache, con su característica camisa y pantalón arrugados. Pelo largo y canoso. Así fue Francisco Toledo.
La noche de este jueves fue confirmado el fallecimiento del originario de Juchitán de Zaragoza, a la edad de 79 años.
Grande y largo su legado, como el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, el Museo de Arte Contemporáneo, el Centro de las Artes de San Agustín, el apoyo a los estudiantes de la Escuela Normal Bilingüe Intercultural de Tlacochahuaya.
Su defensa del cerro del Fortín contra la instalación de un centro de convenciones; su lucha por preservar el maíz criollo; su pintura, su escultura, su arte en todos los sentidos. Su altruismo sobre todo. Adiós a Francisco Benjamín López Toledo.