Yuridiana Sosa/Zona Roja. Foto: Cortesía
Oaxaca de Juárez, Oax., 22 de agosto de 2022.- Las investigaciones de los casos de tentativa de feminicidio de María Elena Ríos y la muerte de Abigail Hay Urrutia, mientras se encontraba detenida, se realizan de forma minuciosa para que no haya impunidad, señaló el fiscal General del estado, Arturo Peimbert Calvo.
El titular de la Fiscalía de Oaxaca señaló en entrevista colectiva que la ley se aplicará de forma estricta, en lo que respecta a las facultades de este organismo.
Sobre el caso más reciente del presunto suicidio de Abigail en los separos municipales de Salina Cruz el pasado 19 de agosto, Peimbert Calvo apuntó que se estudian varias líneas, elementos y circunstancias que tienen que ver con el caso.
En Salina Cruz -donde ocurrió el delito de Abigail-, como en otros municipios, se carece de protocolos para el resguardo de las personas, lo cual no sólo representan violaciones a los derechos humanos, también pueden constituir en faltas que deriven en un delito, mencionó.
Peimbert Calvo aseguró que en próximas horas se resolverá la situación jurídica sobre este caso; el que podría resultar en un feminicidio como señala la familia de la joven madre de 30 años.
CÓMPLICES EN CASO MARÍA ELENA
Respecto al caso de la agresión con ácido de la saxofonista María Elena Ríos, el fiscal de Oaxaca dijo que las investigaciones continúan y en las que recientemente también se contemplan indagatorias a probables cómplices para la protección del presunto autor intelectual que sigue en libertad.
Aseveró que la dificultad para llevar a cabo la detención de Juan Antonio Vera Hernández deriva en las importantes capacidades económicas del implicado, las cuales le facilitan su fuga.
En ese sentido, dijo que no descartan la complicidad y protección de diferentes personas, mismas que pueden ser desde el orden público hasta civil.
Motivo por el cual las investigaciones de este caso también se dirigen a esas personas que dificultan la aplicación de la ley y quienes al mismo tiempo incurren en un delito igual de grave, como el de los autores.