Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 13 de octubre de 2019.- Santo Domingo Tehuantepec vivió ayer una jornada violenta. Enardecidos pobladores de San Blas Atempa exigían justicia por la desaparición de la estudiante Hilary Naxhiely.
Intentaron ingresar a la sede de la Vicefiscalía Regional del Istmo; pretendían linchar a un supuesto violador y secuestrador de la estudiante, que habría sido detenida. Fue necesaria la presencia de la fuerza pública y la Guardia Nacional; fueron horas de tensión, gritos y confusión.
Pero en medio de su desesperación por la no localización de la estudiante, algunos subieron al techo de la Vicefiscalía… y se encontraron con restos humanos, entre ellos un cráneo, ropa desperdigada, y bolsas con mariguana.
Temor, enojo, exigencias, gritos la tarde de ayer frente a la sede de la Vicefiscalía, ubicada en la calle Juana C. Romero número 87, del barrio Laborío. En una de esas, al menos tres jóvenes y una mujer subieron al techo:
“Acá como podemos ver, estamos arriba de las instalaciones de la Agencia Estatal de Investigaciones, miren lo que encontramos por acá, hay ropa tirada por dondequiera, ¿qué será posible que acá pueda estar Hilary?, se escucha en un video difundido a través de las redes sociales.
En las imágenes se aprecia ropa tirada; una osamenta casi completa, con cráneo y costillas; en otras fotografías, al menos dos bolsas con yerba seca con las características de la mariguana.
Hasta la tarde de este domingo, la Fiscalía General del Estado no ha precisado las razones por las cuales se encuentran los restos humanos a la intemperie, así como droga en la sede de la Vicefiscalía.
SILENCIO OFICLA
Hilary Naxhiely López López salió de su domicilio en San Blas Atempa, el viernes por la mañana, con rumbo a la Escuela de Enfermería de la UABJO en Tehuantepec. Pero ya no regresó a su domicilio ese día.
Ese mismo día por la tarde y el sábado, comenzaron los mensajes para pedir la ayuda y localizar a la joven de 21 años de edad.
Pero ante la desesperación por no encontrarla, sus padres, familiares y pobladores de San Blas se organizaron y acudieron a la Vicefiscalía Regional.
En su desesperación, exigían a las autoridades agilizar la búsqueda; a la vez, fueron alertados que había sido detenida una persona, como probable secuestrador y violador de la joven, lo que los enardeció.
En el transcurso de la tarde, la voz de un joven, su hermano, sobre una camioneta, calmó el barullo:
“Naxhiely le habló a mi mamá ahorita, diciéndole que está bien; ahorita me entró otra llamada, diciéndome que Naxhiely está en la ciudad de Oaxaca. Ahorita Naxhiely va a rendir la declaración, vamos a ir por ella, si es el culpable el presunto, ahorita el que tenemos como presunto violador, pues le vamos a dar su merecido”.
Después de las nueve de la noche fue traída la joven, quien entre lágrimas subió a la batea de la camioneta que la trajo a Tehuantepec, pero no pudo articular palabras.
Al verla con vida, finalmente la población se dispersó y ella fue llevada a San Blas. La gente quedó tranquila.
Pero nadie sabe, hasta ahora, oficialmente cuál fue la situación de Hilary Naxhiely, los motivos de la movilización y si hay o no un detenido por su probable desaparición y agresión sexual. Si fue secuestrada, o se fugó con el novio.
