Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., a 16 de enero de 2023.- ¿Por qué el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, restregó en la cara de Salomón Jara las bondades de Alejandro Murat?
¿Por qué las “corcholatas” del mandatario mexicano para sucederlo en la silla presidencial no levantan expectativas en Oaxaca y en el resto de país?
Ambas tienen un denominador y una respuesta común: el ex gobernador oaxaqueño es el as bajo la manga del morenista Presidente, y no será precisamente por el PRI, sino por el Verde Ecologista de México, que navega con las dos banderas, la tricolor y la guinda.
Y López Obrador tiene sus razones —aunque Murat no tenga el talante para ganar la elección—, pues sus tres “corcholatas”, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López, nada más no despegan y el pleito se enraíza en Morena. ¿Ricardo Monreal? Descartado en definitiva.
SHEINBAUM DE CABEZA
La jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum Pardo es una política sin nivel y sin operadores. Tan mala política es que en la pasada contienda perdió varias alcaldías de la Ciudad de México y justamente eso le ha generado múltiples problemas administrativos y de gobernabilidad.
Pero lo que le ha dado al traste con su imagen es la ola de corrupción que arrastra el Sistema de Transporte Colectivo Metro y que, en lugar de combatirla, se ha acrecentado.
Las tragedias de la jefa iniciaron en mayo de 2021 -y aún no hay culpables- con el derrumbe de un tramo elevado de la Línea 12, en que murieron 26 personas, además de arrojar decenas de heridos.
La opacidad sigue reinando en el Metro y no hay justicia; si bien se indemnizó a las familias de las víctimas eso solamente fue para ocultar más la grave corrupción; la construcción de ese puente no fue en su mandato, Sheinbaum no ha tenido la capacidad, ni la voluntad y ni el talante, para llevar a la justicia ante los responsables, entre ellos su contrincante Marcelo Ebrard.
Otra tragedia ocurrió apenas el 7 de enero, con un choque ahora en la Línea 3, donde una joven mujer murió y al menos 70 personas resultaron lesionadas. Es la hora también que no se hallan culpables.
Y las fallas en ese sistema de transporte siguen casi todos los días, como la de este domingo, sin que haya una explicación formal, más que exhibiciones.
Mientras la capital está perdida administrativa y políticamente, Claudia Sheinbaum recurrentemente anda de gira por el interior del país para actos políticos, disfrazados de conferencias.
Eso sí, tiene la preferencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador y de muchos gobernadores, incluyendo el de Oaxaca, Salomón Jara, que no escatiman recursos y esfuerzos para promoverla.
Pero aún así, Claudia Sheinbaum se cae cada día más ante los errores en su gobierno, como la grave inseguridad, con la creciente presencia de grupos del crimen organizado.
EBRARD, DE LA ALTA
El que no suda pero tampoco se acongoja es Marcelo Ebrard Casaubón, secretario de Relaciones Exteriores, cuyo cargo no le da oportunidad para promoverse en el interior del país.
Como responsable de la diplomacia mexicana no ha hecho mal su trabajo, e incluso ha ganado reflectores con ello, pero tiene detrás de sí justamente la tragedia de la Línea 12 del Metro, que se construyó en su gestión como jefe de Gobierno de la capital del país.
Y cuya carta guarda celosamente Claudia Sheinbaum, para utilizarla en el momento adecuado en que vea prácticamente perdidas sus aspiraciones políticas.
Ebrard sí ha hecho algunos recorridos por el país, pero han sido mucho menores que Claudia -quien además ha tapizado el país con carteles, pinta de bardas y espectaculares, violando impunemente la ley- y eso quizá lo tiene alejado del grueso de la población.
Los mexicanos, por ejemplo, no lo identifican como allegado o fiel a la llamada Cuarta Transformación y mucho menos como un hombre cercano al pueblo, como lo representa López Obrador.
Su círculo de influencia son los “fifís” y quizá pudiera tener el visto bueno del gobierno de Estados Unidos, pero de eso a tener la simpatía popular, dista mucho.
En Oaxaca, tiene el respaldo de personajes grises, como los diputados federales Carol Antonio Altamirano y Daniel Gutiérrez, identificados por medrar con las comunidades a través de constructoras, a cambio de “gestionarles” recursos.
Fuera de ello, no hay más líderes sociales que pudieran abogar por Ebrard desde las comunidades.
Apenas este domingo se creó un comité de respaldo al secretario de Relaciones Exteriores, pero más bien parecía un grupo de ciudadanos improvisados, además de tres ediles de la Mixteca, que no saben ni para qué fueron convocados, mucho menos qué harán.
Quien “promueve” a Ebrard desde hace muchos meses es Alberto Esteva Salinas, pero también de pésimos antecedentes e imagen en Oaxaca.
ADÁN EL GRIS
¿Y Adán Augusto López? El paisano de Andrés Manuel López es de los más grises funcionarios incluso en la Secretaría de Gobernación.
En esa dependencia, la segunda en importancia en el gobierno federal, el tabasqueño ha preferido abandonar sus obligaciones y dedicarse a recorrer el país, pero abogando por temas ajenos a la gobernabilidad.
En Oaxaca no se le conoce ningún comité de base ni grupo de seguidores ni simpatizantes; tampoco hay promoción en carteles, bardas o espectaculares; cuando intentó publicitarse en otras partes del país, fue duramente criticado.
En realidad Adán Augusto sólo es una pantalla para distraer la mira de los dos principales contendientes, Sheinbaum y Ebrard.
En realidad el secretario está de adorno en Gobernación, pues los problemas nacionales estallan a cada momento; en realidad Adán Augusto sólo sigue las instrucciones de su paisano y amigo López Obrador, para supuestamente abrir el abanico de aspirantes a la Presidencia de la República.
Nadie sabe si como candidato o como responsable de la política interior del país, Adán Augusto recibió a varios gobernadores, para tirarles línea acerca de la próxima sucesión de Obrador.
“CORCHOLATA” BAJO LA MANGA
El fin de semana reciente, Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, llamó a los mandatarios a apoyar la difusión y promoción de las “corcholatas”, a través de una misiva:
“Sería deseable que, a invitación expresa de usted, en los próximos meses se concretaran visitas en su estado para contribuir a que el pueblo esté informado y, cuando llegue el momento, decida a través de las encuestas”.
Ello sólo generará más repudio político de la oposición y dará más elementos al Instituto Nacional Electoral y al Tribunal Electoral del Poder Judicial para que puedan seguir sancionando a los ya de sí señalados aspirantes.
Mientras tanto, quien ni sufre ni se acongoja es Alejandro Murat Hinojosa. Tiene desde el domingo una sonrisa permanente, a raíz del respaldo de López Obrador hacia él desde Huatulco y en las narices de Salomón Jara.
Lo cual quiere decir: No se metan con Alejandro, nos ayudó mucho y nos seguirá ayudando; también se interpreta como: déjense de acusaciones contra el sexenio de Murat, que ninguna indagatoria prosperará.
Porque Murat no gobernó bien Oaxaca, al contrario; pero supo manejar políticamente las relaciones con el Presidente; se puso de tapete en distintas ocasiones y hoy sus aspiraciones presidenciales se podrían concretar, pero a través del PVEM.
Es, por lo pronto, el plan B de López Obrador, aunque no ya expectativas de triunfo, pues el Verde Ecologista está desaparecido y sólo sobrevive por la monetización de sus diputados y senadores a favor de las iniciativas del Presidente.
En el PRI, como ya lo dijimos, Murat no tiene futuro, pues es vilipendiado; pero tampoco le importa mucho, habida cuenta que sigue con la bendición presidencial y, gane o no gane, seguirá sirviendo a los intereses políticos morenistas… con tal de salvarse de acusaciones, señalamientos y denuncias de corrupción.