Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México a 18 de octubre de 2023.- El fundador y coordinador estatal de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio, y su asistente, fueron ejecutados la tarde de ayer a la entrada de la Secretaría de Salud estatal, en el sur de la ciudad de Chilpancingo, donde se reuniría con la titular del ramo, Aidé Ibarez Castro, reportaron autoridades.
El ataque contra el dirigente social de origen mixteco, de 56 años de edad, y su chofer se perpetró alrededor de las 17:00 horas. Durante el gobierno del priísta Héctor Astudillo Flores (2015-2021), Bruno Plácido gozaba de medidas cautelares que incluían una escolta de la policía estatal y una camioneta blindada, pero ya no contaba con ese beneficio.
Plácido Valerio estaba amenazado por la mayoría de los grupos delincuenciales que operan en Guerrero, como “Los Tlacos”, “Los Ardillos”, “Los Rusos” y el cártel Independiente de Acapulco.
En los dos años recientes, los principales líderes de la UPOEG han sido asesinados, entre ellos Ernesto Gallardo Grande, el “Comandante Maganda”, el dirigente de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) Mario Zamora, y apenas el pasado domingo, Juan Carlos González Olivar, en el municipio de San Marcos.
Bruno Plácido fue uno de los fundadores de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC) en 1995. Después, junto con su hermano Cirino Plácido (fallecido en 2019) y Apolonio Cruz Rosa, fue expulsado de la organización por el coordinador, Eliseo Villar Castillo.
En enero de 2013, Bruno y Cirino Plácido formaron la UPOEG para dedicarse al principio a la gestión social en las comunidades indígenas y después como grupo civil armado para enfrentar al crimen organizado en los municipios de Ayutla de los Libres, Tecoanapa y Florencio Villarreal, en la Costa Chica, así como en poblados de las regiones Montaña y Centro. Además, extendieron su presencia hacia la zona rural de Acapulco, Chilpancingo, Petatlán y Leonardo Bravo.
(Información de “La Jornada”)