Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México, a 14 de enero de 2024.- Dieciocho fosas clandestinas con un número indeterminado de segmentos humanos y un cuerpo expuesto fueron halladas ayer por el colectivo Madres Buscadoras de Sonora, en el ejido El Choyudo, a unos 100 kilómetros de Hermosillo, dio a conocer Cecilia Patricia Flores Armenta, lideresa de la organización.
La fiscalía estatal informó que el área de Servicios Periciales trabaja en la zona para determinar el número de cadáveres que hay en el sitio y convocó a familiares de desaparecidos a acudir al Laboratorio de Inteligencia Científica Forense para entregar muestras de ADN, a fin de facilitar la identificación.
“La cantidad específica de cuerpos o restos óseos será determinado por los especialistas en la materia. De igual forma, la Agencia Ministerial de Investigación Criminal brinda acompañamiento para garantizar la seguridad e integridad de las personas que conforman el grupo de búsqueda”, refirió el organismo.
Ayer en la mañana, Flores Armenta y una veintena de mujeres se trasladaron al ejido El Choyudo para atender una denuncia anónima que alertó de la presencia de cuerpos inhumados por criminales en dichos terrenos.
Alrededor de las 12 horas, la dirigente de las Madres Buscadoras anunció en un grupo de WhatsApp del colectivo que “en un camino a El Choyudo llevamos localizadas (hasta ese momento) 17 fosas con cuerpos humanos. En una estaba una pareja, un hombre y una mujer por la vestimenta de los dos, así como la forma del cráneo; y en otras encontramos al parecer dos mujeres, por las características del cabello, uno rojizo y otro negro”.
En entrevista para “La Jornada”, Cecilia Flores mostró algunos entierros ilegales que aún no eran procesados por los agentes periciales, donde se percibía el fétido olor a cuerpo descompuesto, y entre la tierra se podían observar posibles pertenencias de las víctimas.
“Ha sido muy cansado el día, nos perdimos por dos horas. Como pueden ver es muy grande el terreno, por lo cual no podíamos diferenciar para dónde agarrar, duramos dos horas caminando en pleno sol, sentíamos las madres más grandes que no íbamos a llegar. Terminamos por encontrar 18 fosas y un cuerpo expuesto; nos detuvimos, pero sabemos que hay más”, relató.
Acompañada de otras mujeres, la activista habló del dolor de cada familia que pierde a un hijo, un hermano o un padre y aseguró que México podría triplicar el número de ausentes que niegan las autoridades federales. “Sabemos que no son cien mil los desaparecidos, la cifra podría ser tres veces mayor porque muchas de las familias no denuncian por temor”, dijo.
En mayo de 2018, Cecilia fundó el colectivo Madres Buscadoras de Sonora, cuya labor se extendió a los estados de Sinaloa y Jalisco para localizar a sus dos hijos Alejandro Guadalupe, desaparecido en Bahía de Kino, Sonora, y Marco Antonio Islas Flores, en Los Mochis, Sinaloa.
En enero de 2022, Flores Armenta publicó en redes sociales un video donde exhortó a los líderes de los cárteles que operan en la entidad a no atentar contra la agrupación y permitirles seguir buscando a sus seres queridos.
Amenazas contra activistas
Debido a la lucha que emprendió junto con sus compañeras, así como la cantidad de víctimas que han localizado, muchas han sido amenazas; en su caso, por esta situación tuvo que irse del estado, con vigilancia permanente otorgada por el mecanismo de protección a activistas y defensores de derechos humanos.
(Información de “La Jornada”)