Redacción/Zona Roja Cdmx.
Ciudad de México, a 3 de marzo de 2024.- A lo largo de los 63 meses bajo la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, responsable de la política de “abrazos, no balazos”, se tienen contabilizados los asesinatos de más de 150 militares por enfrentamientos con integrantes del crimen organizado, siendo el año 2023 el más letal para los efectivos del Ejército Mexicano.
De acuerdo con información de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), hasta el término del año pasado se tenía registradas las bajas de 155 militares bajo la presente administración, cifras aún por debajo de los 361 efectivos abatidos en el gobierno del expresidente Felipe Calderón y los 182 en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
En el conteo anual del sexenio del presidente López Obrador, se tiene registro de 19 militares asesinados en el primer año de su administración; para 2020 la cifra bajó a 9 casos; en 2021 y 2022 creció a 29 efectivos abatidos cada año; mientras que en 2023 se contabilizaron las muertes en combate de 69 efectivos del Ejército Mexicano.
Comparando las cifras de 2023 con 2022, el incremento de militares asesinados fue del 138 por ciento; aun así el año pasado no está en la cima de los más mortíferos contra los efectivos del Ejército, esos lugares están reservados para dos años de la administración de Felipe Calderón: en el marco de la “guerra contra el narco” se documentaron las bajas de 73 efectivos en 2012 y 89 en 2010.
EN MICHOACÁN
La tarde de este jueves se reportó un enfrentamiento entre presuntos integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y militares en los límites territoriales de los municipios de Tepalcatepec y Aguililla, en el estado de Michoacán; de manera extraoficial se reportan las muertes de tres efectivos del Ejército Mexicano y cuatro más permanecen en calidad de heridos.
El enfrentamiento se produjo después de una emboscada del grupo delictivo a los militares en la cual habrían utilizado minas artesanales y drones artillados, además de armas de grueso calibre para intentar repeler a las fuerzas del orden.
De confirmarse la muerte de los tres militares, el estado de Michoacán alcanzaría la cifra de 73 efectivos abatidos entre sus límites territoriales, siendo la tercera entidad más mortífera para ellos desde que la Sedena inició el registró de muertes al inicio de la “guerra contra el narco”
Según datos oficiales, Sinaloa, cuna del cártel del mismo nombre y refugio de sus principales líderes -Los Chapitos e Ismael El Mayo Zambada- concentra el mayor número de bajas (164); el número dos en la lista es Tamaulipas (88), territorio en disputa entre los cárteles del Golfo, del Noreste, Los Zetas y algunas facciones del CJNG que han conseguido ganar terreno con alianzas de grupos locales.
EN GUERRERO
Guerrero, estado que enfrenta una ola de violencia en los últimos meses, suma 65 muertes de militares; le sigue Nuevo León, el estado donde en las últimas semanas se ha desatado una disputa entre el Cártel del Golfo y el Noreste por el control de la plaza en Doctor Coss, un municipio que colinda con Tamaulipas.
Otras dos cifras nada halagadoras para la administración de la política de “abrazos, no balazos”, es la muerte de 14 marinos y 10 elementos de la Fuerza Especial de Reacción durante las detenciones de Rafael Caro Quintero y Ovidio Guzmán, en julio de 2022 y enero de 2023, respectivamente; cifras sólo comparadas -por la cantidad de efectivos caídos- con el desplome de un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana durante un operativo contra el narco de Michoacán en 2008, en ese entonces murieron 11 militares.