Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca, Oax., a 4 de agosto de 2025.- Este año ha comenzado a entrevistar a artesanos y activistas de Oaxaca. Cada vez que puede se dice oaxaqueña, aunque haya nacido en el Estado de México, al igual que su esposo, y asegura que apoya a esta entidad.
Esa condición no impide a Ivette Morán de Murat retomar el tema Oaxaca en sus entrevistas o videos en las redes sociales, con otros fines más.
Mientras tanto, Alejandro Murat continúa con su proyecto “Sumando y multiplicando”, supuestamente para ayudar a Morena, y también construyendo, aún de la mano de su padre José Murat, el regreso de su grupo político a Oaxaca. (Por cierto, Murat ahora quiere gobernar el Edomex).
Se comprobó apenas el pasado 30 de julio, en que priistas de alcurnia y supuestos verdeecologistas, todos ligados a los Murat, estuvieron en Tuxtepec en “reunión de amigos”.
A la cabeza, Alejandro Avilés, caracterizado siempre para servir al mejor postor y también para traicionar a quien le da la mano, y Raúl Bolaños Cacho Cué, quien trabaja con el ex gobernador de Oaxaca desde hace muchos años y a quien le debe todos los cargos.
Es el regreso de los priistas que dicen ser morenistas, para pelear el poder a los morenistas orgánicos encabezados por Salomón Jara Cruz y para seguir minando la imagen de éste, a través de diversos mecanismos informativos.
No, no hay ni habrá oposición política ni el próximo año ni en en la siguiente elección federal estatal y federal. El PRI, el PAN, el PRD, están extinguidos en Oaxaca. La pugna será priistas disfrazados de verdeecologistas contra morenistas. Y será una lucha soterrada.
EL REGRESO
A principios de año ya se comenzaba a mencionar en redes sociales a Ivette Morán como próxima candidata a gobernadora; lo mismo hicieron sus publirrelacionistas en la campaña política estatal anterior.
La esposa de Alejandro Murat tuvo que salir, a través de un video, el 26 de febrero, para “agradecer todas las muestras de cariño, las llamadas telefónicas” y demás afectos; luego precisar que “no está en mis intereses personales ser candidata al gobierno de Oaxaca”.
Pero solo fue para dar paso a su regreso, cuando menos en redes sociales, a la entidad oaxaqueña.
Apenas el pasado 25 de julio, en el marco de las fiestas de la Guelaguetza, publicó un video hablando bondades de un maestro mezcalero de Tlacolula de Matamoros.
El 8 de julio entrevistó a una artesana originaria de Villa Hidalgo Yalálag; el 23 de abril hizo lo mismo con un artesano del barro negro de San Bartolo Coyotepec.
A principios del año entrevistó a Jocabed Betanzos, ex regidora priista pero cuya carrera político-administrativa ha estado ligada a Benjamín Robles Montoya, ahora del PT.
Mientras tanto su esposo, Alejandro Murat Hinojosa, continúa su proyecto de “Sumando y multiplicando”; el 3 de julio y el 3 de mayo estuvo en el Estado de México, en reuniones proselitistas.
Pero su presencia se continuará extendiendo a otras entidades del país, incluyendo, por supuesto, a Oaxaca. No busca gobernar esta entidad, porque sabe que no terminó bien su sexenio y dejó múltiples irregularidades, pero sí el Edomex.
El 2 de julio pasado se reunió con un grupo de mujeres de la organización “50+1”, del que forma parte Mariana Benítez —otra priista disfrazada de morenista— y Ana Vásquez Colmenares, quien fuera funcionaria en su gobierno.
El 10 de abril y bajo la bandera de reconocimiento a la etnia afromexicana, “coincidió” de nuevo con la senadora Susana Harp, quien también está preparado su regreso, con antagónicos a Salomón Jara.
Y como se informó en este mismo espacio, el 2 de abril se dio el “destape” con Luisa Cortés en la Ciudad de México, quien ya se anda promoviendo en el estado, y cuya carta fuerte en ese encuentro, para promover a artesanos oaxaqueños, fue la presencia de Alejandro Murat.
“CARTA FUERTE”
Y el 30 de julio, de acuerdo con publicaciones en redes sociales afines al muratismo, Alejandro Avilés, priista de toda la vida pero beneficiado ahora con una beca federal morenista, a través del disfraz del PVEM, encabezó una reunión en Tuxtepec.
Según sus panegíricos fue para “destapar” al hoy diputado federal por el Verde Ecologista, Raúl Bolaños Cacho Cué, ligado toda la vida con los Murat, quienes lo criaron políticamente como aliado y aún lo mantienen para sus fines personales.
Llama la atención entre los asistentes Jorge Ilescas Delgado, el “Chester”, próspero empresario restaurantero en los Valles Centrales y supuestamente investigado por probable desvío de recursos cuado fue funcionario estatal.
También otros priistas de alcurnia, como Antonio Sacre, Carlos Grau López, Antonio Amaro Cancino, Gabriel Cué Navarro, todos ligados al muratismo.
Avilés Álvarez, como siempre lo ha sido, alabó la supuesta trayectoria de Bolaños Cacho Cué —quien regresa a Oaxaca solamente cuando busca votos para un enésimo cargo y luego no vuelve a saludar a sus electores—. Pero más aún, habló abiertamente de un proyecto que se extenderá por todas las regiones del estado.
Y aprovechar, aprovecharán, la guerra interna que hay desde hace varios meses en el gobierno oaxaqueño de la 4T, por las ambiciones de suceder a Salomón Jara.
Evidentemente que si estas fracturas continuan —por cierto, alentadas desde una oficina del Palacio de Gobierno contra sus propios compañeros y compañeras de gabinete—, tendrán más oportunidades los priistas disfrazados de verdes.
Así que la lucha no será contra la oposición, que en Oaxaca ya no existe más que las dirigencias que cobran importantes sumas de dinero que se dividen entre ellos, sino de morenistas contra neomorenistas. ¿Quién gana?
