Lisbeth Mejía Reyes/Zona Roja.
Oaxaca, Oax., a 25 de agosto de 2025.- Debido a que los ingresos laborales de seis de cada 10 mujeres son menores a los necesarios para la canasta básica, también porque la mayoría de quienes están en el mercado laboral se desempeñan en la informalidad o porque quiere trabajar, pero por diversas circunstancias no pueden, las mujeres enfrentan en el estado de Oaxaca las peores condiciones laborales del país.
En su reporte «Estados con lupa de género», el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) señala que aun cuando ningún estado cuenta con las condiciones óptimas para sumar y retener a más mujeres en el mercado laboral, es Oaxaca el estado con las peores condiciones de entre los 32 estados del país.
En calificación, Oaxaca apenas obtuvo 33.1 de los 100 puntos de la evaluación. El más alto fue el de Ciudad de México, con 67.2.
Las condiciones señaladas al inicio son solo algunas de las que enfrentan las mujeres en Oaxaca, donde también inciden la inseguridad, los homicidios dolosos o los feminicidios, las diferencias de ingresos entre hombres y mujeres, la mayor dependencia de las mujeres de ingresos (por ejemplo, de remeras, de apoyos gubernamentales y otros) o porque a causa de los roles tradicionales están a cargo del cuidado de adultos mayores y porque no existen o son mínimos los sitios de este tipo.
A nivel país, «ninguna entidad federativa alcanza condiciones óptimas para sumar y retener a más mujeres en el mercado laboral y, que en consecuencia, cuenten con mayor autonomía económica. A pesar de ello, la Ciudad de México es la entidad con mejores resultados, seguida de Nuevo León y Baja California Sur. Por otro lado, Oaxaca ocupa el último lugar con un desempeño muy bajo», señala el IMCO, un centro de investigación en política pública.
Con Oaxaca, en el país son 15 los estados con «bajo desempeño por las condiciones laborales que ofrecen a las mujeres». Entre estos: Chiapas, Veracruz, Guerrero, Puebla y Durango.
El estudio comprende 17 indicadores agrupados en tres pilares: Entrada, Permanencia y Autonomía. Asimismo, se clasifica a los estados en seis niveles de desempeño, que van desde muy alto hasta muy bajo, según las condiciones laborales que ofrecen a las mujeres.
En cuanto al de entrada laboral, el IMCO explica que la educación impulsa la participación económica de las mujeres. Sin embargo, Oaxaca y Chiapas son los estados con menor proporción de mujeres con educación media superior (34%), mientras que en la Ciudad de México se posiciona en el otro extremo (64%).
En cuanto al pilar o segmento de retención de mujeres en el mercado laboral, el estudio analiza el aspecto de la informalidad. «La informalidad se traduce en una carencia de certidumbre jurídica, acceso a servicios de salud y una ausencia de prestaciones laborales. En Oaxaca y Guerrero, 80% y 75% de las mujeres trabajan en la informalidad, mientras que en Chihuahua y Coahuila estas tasas disminuyen a 31% y 35%, respectivamente».
En cuanto al tercer pilar, el de autonomía, el IMCO muestra que los estados de Baja California Sur, Colima y Baja California tienen «los mejores resultados en promover la autonomía económica de las mujeres, mientras que Chiapas, Guerrero y Oaxaca ocupan los últimos lugares». Este pilar, detalla, es para medir la capacidad que las mujeres tienen en los estados para generar sus propios ingresos, por lo que «se consideran indicadores como la brecha de género en inclusión financiera, la propiedad de la vivienda y la participación en el emprendimiento formal».
