Lisbeth Mejía Reyes/Zona Roja.
Oaxaca, Oax., a 25 de noviembre de 2025.- Con al menos 280 mujeres víctimas de feminicidios y mil 139 desaparecidas desde el 1 de diciembre de 2022 a la fecha, colectivas feministas denunciaron que en el gobierno «la primavera no ha llegado para las mujeres» en Oaxaca.
Este martes, en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, las organizaciones que integran el colectivo Mujeres Oaxaqueñas Tejiendo Comunidad, además de activistas y mujeres diversas marcharon en la ciudad de Oaxaca para exigir un alto a la violencia y justicia para las sobrevivientes y víctimas de feminicidios o de otras violencias.
En la marcha también participaron niñas, quienes en compañía de sus madres y a través de sus carteles exigieron respeto y justicia para ellas y para Noelia, la niña de 4 años de edad que junto con su madre fue asesinada a principios de noviembre en Juchitán de Zaragoza.
El contingente se reunió en la antimonumenta, en la fuente de las Ocho Regiones, donde leyó un pronunciamiento y partió rumbo al zócalo de la capital pasando por la calzada Porfirio Díaz y la avenida Juárez.
La defensora Sandra Domínguez, la pequeña Noelia, Abigail Hay Urrutia (quien perdió la vida en condiciones aún extrañas en los separos de Salina Cruz, al igual que Tamara), María del Sol Cruz Jarquín, Dafne Carreño, entre otras, fueron solo algunas de las tantas mujeres por quienes se exigió justicia.
Las cifras de mujeres asesinadas y desaparecidas no son solo números, expresaron las colectivas sobre violencias que afectan a familias y comunidades, pero que también dan cuenta de la impunidad que deja lejos el acceso a la justicia.
«La violencia se expresa de múltiples formas: física, sexual, psicológica, digital, económica, política, patrimonial, obstétrica y simbólica. Y se agrava con las condiciones estructurales no resueltas por el estado, como son la pobreza, marginación, la trata de personas, la prostitución forzada, la militarización y la invasión del crimen organizado en los territorios».
Con una larga manta en la que se leía»Oaxaca feminicida», las decenas de mujeres y niñas marcharon para exigir una vida libre de violencias. También recordaron a las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal (asesinadas el 25 de noviembre de 1960 durante el régimen de Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana), por quienes se instauró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
La marcha fue pacífica. Sin embargo, algunos establecimientos de la calzada Porfirio Díaz fueron cercados con maderas por el temor de daños.
De igual manera, tanto en el Palacio de Gobierno como en la catedral metropolitana el gobierno estatal instaló vallas metálicas, una acción que ha copiado del gobierno federal de la presidenta Claudia Sheinbaum y sus antecesores.
En la calzada Porfirio Díaz también salió un hombre en estado de ebriedad para confrontar al contingente de mujeres que siempre se mantuvo en calma y sin que interviniera algún policía de los que estaban cerca ni la ciudadanía. Ante esta situación solamente los periodistas intervinieron.
