Evlin Aragón/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 28 de mayo de 2020.- “Todo se acabó, todo el patrimonio de muchos años se acabó, 23 años aquí y se acabó…”. Entre lágrimas, así platica doña Guadalupe Santiago su tragedia.
Es la propietaria de un local de ropa y calzado al interior de la Central de Abasto, de decenas que fueron consumido por el fuego, luego del incendio que se registró este miércoles por la noche en la zona comercial más importante de la capital oaxaqueña.
En un conmovedor relato, refiere que arribaron al lugar desde el momento que inició el incendio para tratar de ayudar, pero nada se pudo hacer ante las voraces llamas que arrasaron con su espacio en el que también había habilitado un pequeño taller de costura a fin de ayudarse económicamente para sostener a su familia.
“Yo lo único que pido al gobierno estatal, federal o a quien sea es que nos ayude, pero que la ayuda llegue a los locatarios, que no haya intermediarios, que el apoyo llegue a nuestras manos”, dice.
Su petición es fundamentada, ya que los líderes en la zona son conocidos por beneficiarse de forma personal y a unos cuantos únicamente.
Pese a tener de frente la desgracia y ante las cenizas de lo que fue su patrimonio durante más de dos décadas, Guadalupe no pierde la fe en que pueda salir adelante y que la tragedia sea sólo el comienzo de algo mejor.
“Yo tengo fe, me voy a levantar a pesar de mi edad, tengo ánimos para salir adelante, voy a salir adelante. Esto es un principio y tengo que salir adelante. Tengo fe”, se repite así misma.
Para la mujer, como para muchas otras personas que tenían sus locales en la zona de locales de ropa de la Central, el lugar era más que un simple comercio, era su casa ya que pasaban la mayor parte del día ahí y era su único patrimonio para heredar a sus hijos.
“Aquí era nuestra casa, de las siete de la mañana a las nueve de la noche, todos los días. Se acabó todo, pero tenemos la esperanza de salir adelante”, refiere la mujer que con la venta en la Central de Abasto sacó adelante a dos hijos a quienes les dio estudio, incluso a nivel universitario.
GOLPE DURO
Para Isabel, otra comerciante de la misma zona, el golpe ha sido más duro, se nota mucho más afectada y con lágrimas en los ojos relata que perdió todo al interior de su negocio en el que vendía ropa desde hace 22 años. Poco pudo hablar debido a las lágrimas y hasta tuvo que ser reconfortada por su hija que la acompaña
En un recorrido realizado por ZONA ROJA se pueden ver decenas de locales afectados por el fuego, algunos aún con restos de humo por lo que personal del Cuerpo de Bomberos, policía municipal y estatal buscan abrir por la fuerza para corroborar que no exista riesgo de que se vuelva a reactivar.
Después de 14 horas los trabajos, continúan en la zona cero, la que ha sido señalada por el edil de Oaxaca de Juárez, Oswaldo Garcia Jarquín como un “foco rojo” para el contagio de Covid-19 y que este miércoles fue alcanzada por el fuego.
Locales consumidos, de ropa, zapatos y demás productos calcinados y acumulados por montones en los pasillos de la zona seca de la Central de Abasto son parte del panorama que se ve esta mañana.
Láminas rotas, escombros, mangueras tiradas y agua en el piso completan la imagen de una tragedia que se vivió este miércoles por la noche y que dejó a decenas de personas sin el patrimonio que por años les costó obtener.
Hasta el momento no hay saldo oficial. Fue después de las nueve de la mañana de hoy en que arribaron los peritos de la Fiscalía General del Estado para iniciar los levantamientos, mientras que personal de Bomberos continúa revisando la zona.
Hasta el mediodía, el edil de Oaxaca de Juárez, Oswaldo García Jarquín, no se había acercado a la zona para respaldar a los afectados.