Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 13 de julio de 2020.- La pandemia por Covid-19 reveló también nuestro desprecio por el medio ambiente, lo que ninguna autoridad quiere ver. Hay una ley, que prohíbe el uso de plásticos y unicel, pero el propio Poder Ejecutivo se niega a acatarla.
¿Y la Secretaría del Medio Ambiente, Energías y Desarrollo Sustentable? Duerme, al igual que lo hizo con el ataque a las eólicas; su titular, el juchiteco Samuel Gurrión Matías, ni tiene idea de la ecología ni de protección al ambiente ni de nada; el confinamiento sólo le ha servido para descansar por más de tres meses.
De acuerdo con datos del Poder Legislativo, fue el miércoles 10 de abril del 2019 en que el Congreso de Oaxaca aprobó una iniciativa del diputado Horacio Sosa, de Morena, en que se efectuaron diversas reformas y adiciones a la Ley para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Sólidos.
Dicha normatividad prohíbe en todo el estado la venta, distribución o uso de botellas desechables de plástico, así como de envases y embalajes desechables de unicel, con el fin de prevenir la contaminación ambiental que generan esos materiales.
Según el decreto original, entraría en vigor el pasado 22 de diciembre para las grandes y medianas empresas que comercialicen directamente al consumidor final, así como las empresas de cualquier tamaño que distribuyan antes de su venta al consumidor final productos con envases desechables de PET, o de unicel.
Sin embargo, distintas cámaras de comercio y agrupaciones de industriales se acercaron al Congreso del Estado, inicialmente en la búsqueda de una contrarreforma y posteriormente para manifestar su voluntad de cumplir cabalmente con la norma, pero solicitando una prórroga para ello, por considerar insuficiente el periodo de gracia de seis meses previsto en el decreto original.
Fueron principalmente las compañías Coca-Cola y Pepsi-Cola las que se opusieron e incluso intentaron sobornar a algunos legisladores para echar abajo el nuevo ordenamiento.
De acuerdo con el Poder Legislativo, con fecha 8 de enero del 2020, el Congreso aprobó una ampliación de seis meses al plazo inicial para que las grandes y medianas empresas pudieran terminar con el total de producto que mantenían en inventario.
Esta iniciativa contó con el apoyo del conjunto del Poder Legislativo y fue aprobada como asunto de urgente y obvia resolución por la totalidad de los diputados presentes, de los distintos grupos parlamentarios.
Sin embargo, según se tiene conocimiento, hasta finales de junio el Gobierno del Estado no había publicado el decreto en el Periódico Oficial del Estado, por lo que formalmente no ha comenzado a correr el plazo de la ampliación.
Por lo tanto, está vigente el decreto anterior en donde se establece que el plazo para las grandes y medianas empresas feneció el 22 de diciembre.
Pero ni en ese ni en ningún caso ha actuado el Poder Ejecutivo; por el contrario, tolera y promueve el uso de los plásticos.
Un ejemplo claro y reciente es la distribución de despensas del DIF Oaxaca en bolsas de plástico, con logotipo de la institución que preside Ivette Morán de Murat.
En la actual pandemia, el uso del plástico también se ha incrementado, en la distribución de alimentos vía repartidores en motocicleta, y nadie dice nada.
Al inicio de este sexenio se creó la Semaedeso, primero encabezada por el empresario cafetalero José Luis Calvo Ziga, que nada hizo por el medio ambiente.
Su prioridad fue sus relaciones con los empresarios a nivel nacional y algunas acciones a favor de las compañías eólicas.
Hace un año y un mes, Samuel Gurrión, distinguido más por su veleidad política y las superficialidades, lo único que ha hizo en unas semanas fue regalar recipientes de plástico para reciclar la basura, y para lo cual hacía actos proselitistas en cada entrega.
Mientras tanto, nadie ve ni atiende la grave contaminación de las ladrilleras en la zona de la capital; nadie ve ni atiende la grave polución en los ríos “Atoyac” y “Salado” que atraviesan la ciudad, pese a un juicio de amparo; nadie ve ni atiende la grave contaminación y saturación del relleno sanitario ubicado en jurisdicción de la Villa de Zaachila.
En el tema de la ley contra los plásticos, el Poder Legislativo considera que retrasar la publicación del decreto para publicar las reformas a dicha norma, es una argucia para prolongar la prórroga y contabilizar los seis meses hasta que haga oficial la publicación.
“Este hecho muestra claramente el contubernio entre el Gobierno del Estado y la industria de los refrescos y alimentos envasados, y deja claro que el gobierno no vela por los intereses de la ciudadanía oaxaqueña, sino por el dinero de los grandes capitales”, ha dicho la diputada morenista Legisladora Magaly López.
Incluso ha amagado con que se deje sin efecto la publicación del decreto 1188, del 8 de enero de 2020, con el que se otorgaría la prórroga de seis meses a las empresas.
Pero al gobierno de Oaxaca no le interesa en absoluto el medio ambiente.
