Ismael García M./Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., a 3 de octubre de 2022.- ¿Preveía en Oaxaca un cambio de poderes violento, con bloqueos, marchas y protestas, como sucedió hace seis años?
¿Esperaba que con la llegada de Salomón Jara Cruz al poder, a partir del 1 de diciembre, habría paz, justicia, castigo a los corruptos, auditorías e investigación contra probables saqueos? ¿Creía que con la Cuarta Transformación ahora sí habría justicia? Pues no.
El domingo 2 de octubre de 2022 será recordado como un día especial para la vida política del estado. No precisamente histórica, mucho menos democrática.
Sino porque en esa fecha, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio la orden en Oaxaca de una transición ordenada, un cambio de poderes pacífico, el próximo 1 de diciembre.
E incluso pidió que el mandatario saliente, Ismael Alejandro Murat Hinojosa, se diera la mano con su sucesor, Salomón Jara Cruz. Priista y morenista sellaron así un cambio de poderes terso… dos meses antes de la fecha marcada por la Constitución del estado y sin importar la injerencia federal.
PREMONICIONES
En ZONA ROJA ya lo habíamos escrito con mucha antelación, incluso meses antes de las elecciones del pasado 5 de junio, en que había un pacto del gobierno oaxaqueño con López Obrador para entregar el estado al Partido Morena.
También hemos escrito en este espacio que habrá priistas (ulisistas y muratistas) en el gabinete de Jara Cruz, pese a que éste lo niegue en público.
El gobernador electo tenía previsto acudir el domingo 2 de octubre al 11 aniversario de la fundación de Morena, en la capital.
Pero una llamada telefónica cambió su agenda y apenas le dio tiempo para grabar un mensaje alusivo a su partido, y para enviar a su esposa y a su hija en su representación.
La orden era presentarse el domingo en la Villa de Mitla, pues el Presidente quería hablar con él, previo al encuentro de inauguración del banco Bienestar.
Así sucedió, por eso no tomó por sorpresa a Jara las palabras del fundador de Morena en pleno evento:
“Alejandro Murat nos ha ayudado mucho y se lo agradecemos. Y vamos también a ayudar al gobernador electo, Salomón Jara.
“Miren, la transición.. a ver párense y dense la mano aquí (lo cual ocurrió de inmediato)”, ordenó López Obrador.
Y ni bien se iba el Presidente de la Villa de Mitla, y ya Salomón Jara lo confirmaba así en entrevista colectiva:
“He visto una buena actitud de parte del gobernador, no así en Tamaulipas, ayer (sábado 1 de octubre) estuve en la toma de protesta de Américo Villarreal y corrió el gobernador de Tamaulipas, aquí es diferente, ha habido otro tipo de relación, muy respetuosa y sobre todo muy buena relación”.
“Todavía no tenemos nuestra entrega recepción, esperemos ya cuando estén los equipos de transición, ya sabemos qué va a pasar”, dijo cuando le preguntaron acerca de auditorías o probables casos de corrupción.
Tan contento está Salomón Jara con Murat, que hace un mes hasta elogió la política económica actual e incluso dijo que copiaría dichos modelos para implementarlos en su mandato.
ADEMÁS RECONOCIDO
El viernes, primer día de la gira, López Obrador no reparó en elogios al priista Alejandro Murat e incluso anunció un reconocimiento, un homenaje, al gobernador; incluso, ahí mismo pidió revisar su agenda y estableció que será cinco días antes de que finalice el sexenio estatal.
No es para menos el reconocimiento al gobernador oaxaqueño, pues ha apoyado políticamente al mandatario mexicano en todo lo que ha pedido políticamente, incluyendo el respaldo a las Fuerzas Armadas y la militarización del país.
En realidad ambos no se han ruborizado al dirigirse mensajes halagadores y ahora Alejandro Murat tiene un futuro promisorio; primero, aceptar la invitación de incorporarse al gabinete federal, en su caso a una embajada; segundo, tener todo el respaldo obradorista para dirigir el PRI nacional y de ahí buscar ser candidato a la Presidencia de la República.
LAS OBRAS
No ocultan su tersa y amigable relación, aunque no se haya reflejado de manera suficiente en la obra pública federal, pero sí en recursos presupuestales extraordinarios para el gobierno oaxaqueño, sin que se sepa el destino de millonarias transferencias.
De las obras supervisadas por López Obrador, a cuatro años de su mandato, el rompeolas registra apenas un avance del 40 por ciento, por incontables conflictos entre transportistas que se disputan la obra.
Del Corredor Interoceánico en general, ni siquiera hay cifra de avance y apenas este lunes, el ejido Estación Mogoñé inició un enésimo bloqueo a la vía férrea.
La supercarretera Oaxaca-Istmo -iniciada en el sexenio de José Murat-, apenas lleva un 65.12 por ciento y, evidentemente, no será concluida este año.
Como tampoco terminarán antes de que finalice el sexenio la supercarretera Oaxaca-Costa -iniciada por Ulises Ruiz-, que registra 83.85 por ciento.
De 300 sucursales del banco Bienestar, el domingo en Mitla fue inaugurada la número 102.
De los caminos artesanales, poco se sabe del número de accesos a municipios terminados, ante la opacidad del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, que dirige el oaxaqueño Adelfo Regino, ausente del estado.
Así que las megaobras de López Obrador no serán inauguradas en el sexenio de Alejandro Murat. Pero eso no obsta para rendirle homenaje, por su apoyo político más que por sus acciones de bienestar para el estado.
Eso sí, no se sabe si los cuatro millones de oaxaqueños está contentos con los seis años de gobierno de Murat. Pero sí lo está el Presidente de México, sí, aquel que cuando candidato, muchas veces criticó la corrupción de los priistas, el dispendio, la opacidad.
En realidad tampoco López Obrador hizo una consulta al pueblo bueno y sabio de Oaxaca para el homenaje, pero eso es lo que menos importa.
El caso es que, con aval o no de los oaxaqueños, habrá reconocimiento a Alejandro Murat una semana antes de que concluya su sexenio.
Porque le seguirá siendo útil políticamente al Presidente, a cambio de no indagar en las cuentas públicas de los seis años.
