Evlin Aragón/Zona Roja.
Oaxaca de Juárez, Oax., 15 de noviembre de 2020.- “El 4 informe de Gobierno de @alejandromurat y yo les informo que, de 4 años de gobierno, Ayutla lleva 3 años sin el agua de su manantial, sin justicia para las víctimas del despojo armado de las tierras y el manantial y sin el respeto a sus derechos humanos vitales #AguaParaAyutlaYa”.
Es el tuit de Joaquín Galván, habitante de San Pedro y San Pablo Ayutla y activista por los derechos de las comunidades indígenas, con el que reclama que el mandatario estatal presumiera el acceso al agua potable como parte de sus obras de infraestructura en el marco de su informe, pero aún no de solución a la exigencia del municipio Mixe.
Así mismo, recordó la problemática que viven las y los habitantes de la zona, quienes en plena pandemia –donde se pide el lavado constante de manos– y pese a contar con una resolución judicial a su favor, continúan sin el acceso al vital líquido.
Hace apenas unos días y también a través de sus redes sociales, Joaquín Galván evocó que la comunidad exige a los responsables la reconexión inmediata y sin condiciones a su manantial, de acuerdo con la resolución judicial 795/2017.
“El agua es fuente de vida, parte de nuestra esencia; por lo tanto, no se vende, no se intercambia y no está sujeta a ninguna negociación”, refiere una lona que se ubica en el palacio municipal de la localidad.
Fue el pasado 30 de julio que el Juez Tercero de Distrito en el Estado de Oaxaca, resolvió y dictó sentencia en el juicio de amparo número 795/2017, ahí determinó que las conductas de las autoridades responsables son injustificadas y violatorias del derecho humano al agua de la comunidad de Ayutla.
Por lo anterior mandató que se restituya a la comunidad el pleno goce del derecho al agua, adoptando las medidas urgentes e indispensables para garantizarlo y se realice la reconexión al manantial para abastecer a la comunidad.
Sin embargo, el gobierno de Oaxaca se ha negado a cumplir con la resolución judicial argumentando un conflicto agrario y proponiendo la perforación de un pozo profundo, con una inversión de 4.9 millones de pesos, que busca dotar de agua suficiente y de calidad a la población, mismo que fue rechazado por la autoridad municipal que insiste en la reconexión directa al manantial.