Redacción/Zona Roja Cdmx.
(Información de Uno Tv)
Ciudad de México, a 16 de diciembre de 2025.- El presidente de Donald Trump declaró este 15 de diciembre que el fentanilo ilícito será tratado por su gobierno como un arma de destrucción masiva, al considerar que el daño que provoca supera al de cualquier bomba convencional.
La decisión quedó formalizada mediante una Orden Ejecutiva firmada en la Casa Blanca, con implicaciones penales, financieras, militares y de seguridad nacional.
Durante un acto oficial en el Despacho Oval, Trump sostuvo que el narcótico sintético “envenena comunidades enteras” y representa una amenaza equiparable a un ataque químico, al tiempo que entregaba medallas a tropas estadounidenses desplegadas en la frontera con México.
“Con esta histórica orden ejecutiva que firmaré hoy, clasificamos formalmente el fentanilo como un arma de destrucción masiva, que es lo que es”, dijo Trump durante el evento.
La Orden Ejecutiva instruye al Fiscal General de Estados Unidos a presentar cargos penales inmediatos, buscar sentencias más severas y modificar criterios judiciales en casos de tráfico de fentanilo. El documento también ordena al Departamento de Estado y al Departamento del Tesoro actuar contra activos, cuentas e instituciones financieras vinculadas a la fabricación, distribución y venta de esta droga y de sus principales precursores químicos.
Desde la óptica del gobierno estadounidense, el fentanilo “se asemeja más a un arma química que a un narcótico”, al tratarse de una sustancia en la que dos miligramos —equivalentes a 10 o 15 granos de sal— pueden resultar letales.
La directiva presidencial contempla que el Departamento de Guerra, en coordinación con el Departamento de Justicia, determine si deben desplegarse recursos de seguridad nacional reforzados ante emergencias relacionadas con armas de destrucción masiva. Asimismo, se ordena actualizar los protocolos de respuesta a incidentes químicos para incluir explícitamente la amenaza del fentanilo.
En paralelo, el Departamento de Seguridad Nacional deberá identificar redes de contrabando mediante inteligencia vinculada a amenazas de no proliferación, bajo el argumento de que el narcótico podría ser utilizado en ataques terroristas concentrados y de gran escala.
El presidente estadounidense comparó el tráfico de fentanilo con las importaciones de opio del siglo XIX que devastaron a China y derivaron en las Guerras del Opio, al advertir que hoy existen organizaciones criminales y terroristas extranjeras que utilizan las ganancias del narcótico para financiar asesinatos, terrorismo e insurgencias.
La Casa Blanca sostiene que el fentanilo es actualmente la principal causa de muerte entre estadounidenses de 18 a 45 años, lo que, a juicio del Ejecutivo, justifica un enfoque de guerra total contra su producción y distribución.
La designación del fentanilo como arma de destrucción masiva se suma a una serie de medidas adoptadas por Trump desde su regreso al poder, entre ellas la declaratoria de emergencia nacional en la frontera sur, la designación de cárteles como organizaciones terroristas, la imposición de aranceles a México, Canadá y China por el flujo de drogas, así como la autorización de acciones militares contra infraestructuras del narcotráfico.
